La CNMV extrema las precauciones sobre los 8.000 millones de euros que un determinado grupo de fondos españoles tiene en bonos basura, aquellos donde estas emisiones de deuda de alto riesgo pesan más de un 25%. Es una pequeña cantidad, apenas un 3% del total de patrimonio que gestionan los fondos en España, pero al supervisor financiero le preocupa que los inversores no sean totalmente conscientes del mayor riesgo de crédito que están asumiendo con sus fondos.
Desde 2017, ha aumentado en un 47% el número de fondos españoles que en su folleto han abierto la posibilidad de invertir en bonos de alto rendimiento (‘high yield’) y de baja calidad crediticia, hasta un total de 496 productos. El entorno de bajos tipos de interés está provocando que los gestores reposicionen sus fondos en activos de renta fija que tienen más potencial de revalorización pero, también, un mayor riesgo de pérdida por ‘default’. Los datos han sido ofrecidos por Sebastián Albella, presidente de la CNMV, en la presentación del II Observatorio del Ahorro y la Inversión en España de Bestinver y el IESE.
En particular, Albella ha puesto énfasis en aquellos fondos que invierten más de un cuarto de su cartera en bonos basura. Son 200, un 12,5% de los más de 1.600 fondos de derecho español. De ellos, unos 100 superan ampliamente el 25% en bonos de alto riesgo.
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La gestora de BBVA crea una unidad de alternativos con José Luis Segimón al frenteEn este sentido, la CNMV ha solicitado a las gestoras que en el documento de datos fundamentales para el inversor (DFI) de estos fondos se especifique que este tipo de bonos tienen más potencial de rentabilidad pero, al mismo tiempo, un riesgo adicional de iliquidez en casos adversos de mercado. Y también ha pedido a los distribuidores que venden fondos extranjeros que sean ellos quienes adviertan a sus clientes de este mayor riesgo de crédito cuando pregunten por un fondo internacional con mucha carga de ‘high yield’ y bonos sin rating, ya que los fondos extranjeros están sometidos a la supervisión de sus respectivos organismos financieros de origen y no de la CNMV.
LA CARRERA POR LOS ALTERNATIVOS NO COTIZADOS
El presidente del supervisor también ha dado un toque de atención a los activos alternativos que se venden a los minoristas, en un escenario donde hay una carrera por parte de las gestoras y las entidades por lanzar nuevos productos de activos privados no cotizados. A cierre de septiembre de 2019, había 328 millones en capital riesgo y otros activos alternativos ilíquidos colocados entre los pequeños inversores. La CNMV es partidaria de abrir esta vía de inversión a los minoristas, pero con condiciones.
El pasado verano, el organismo aseguraba que es favorable a que se baje el mínimo de entrada de 100.000 euros a 10.000 euros en activos como el capital riesgo o los ‘hedge funds’, siempre y cuando haya asesoramiento financiero y estas inversiones no pesen más del 10% sobre el patrimonio total del cliente.