La rebaja que Fitch Ratings ha realizado sobre la calificación que otorga a EEUU como emisor a largo plazo en moneda extranjera, que pasó de 'AAA' a 'AA+', ha generado reacciones en los mercados y en el comportamiento del Tesoro estadounidense, aunque sus consecuencias pueden no terminar ahí, ya que, como apuntan los analistas de Pimco, esto "aumenta las posibilidades de un cierre del Gobierno este otoño".
Libby Cantrill, directora general de Políticas Públicas en EEUU de Pimco, destaca que "es probable que la rebaja de la calificación endurezca las opiniones de los republicanos de la Cámara de Representantes, que exigen recortes del gasto más significativos que los acordados en el proyecto de ley bipartidista sobre el límite de la deuda".
"Por supuesto, un cierre del gobierno sería irónico, ya que parte del motivo de la rebaja de la calificación de Fitch fueron los 'enfrentamientos políticos', como los cierres del gobierno", apunta.
Si bien un cierre del Gobierno tiene repercusiones económicas a corto plazo, estas "suelen ser efímeras y se invierten cuando el Gobierno vuelve a abrir", aunque en este caso "podría coincidir con una caída ruidosa desde una perspectiva económica y podría exacerbar potencialmente un período económicamente incierto".
En este sentido, Cantrill recuerda que se producirá "la reanudación de los pagos de préstamos estudiantiles para unos 45 millones de prestatarios", y alerta de un posible "impacto práctico del endurecimiento del crédito de los bancos regionales, además de una Fed dependiente de los datos".
Con todo, considera que "si el gobierno se cerrara y los republicanos de la Cámara de Representantes fueran capaces de asegurar los recortes que quieren, esto haría poco para cambiar la trayectoria fiscal, ya que para hacerlo, los programas de ayuda social (que representaron el 66% del presupuesto el año pasado) tendrían que ser reformados, lo que actualmente no es una posibilidad".
"A su regreso en septiembre, la Cámara de Representantes y el Senado disponen de 12 días legislativos para aprobar 11 proyectos de ley de créditos. Aunque el Senado está en mejor forma, ya que ha aprobado casi todos los 12 proyectos de ley de asignaciones fuera del comité (y casi todos ellos por unanimidad), simplemente no habrá tiempo para conciliar las diferencias entre lo que apruebe la Cámara y los proyectos de ley del Senado" destaca.
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Golpe a EEUU: Fitch rebaja su calificación de 'AAA' a 'AA+' por el deterioro fiscalNormalmente, agrega una "resolución continua" se utilizaría como una medida provisional para financiar el gobierno a los niveles actuales y ganar más tiempo, aunque ve "poco probable" que los republicanos de la Cámara de Representantes, especialmente el 'Freedom Caucus', apoyen esta medida, ya que "ven más oportunidades políticas en abogar por la restricción fiscal y el posible cierre del Gobierno".
"No obstante, si se produjera un cierre, creemos que probablemente terminaría el 1 de enero, que es la fecha límite real para financiar el gobierno. Si para entonces no se han aprobado los proyectos de ley de créditos 'ordinarios', entraría en vigor un recorte generalizado del 1% como parte del acuerdo sobre el techo de la deuda", concluye.
"EL AUMENTO DE LOS DÉFICITS PUEDE TENER UN COSTE"
Para Mike Cuzdil, gestor de carteras de Pimco, la acción de Fitch puede interpretarse "como un recordatorio de que el aumento de los déficits puede tener un costo", y vaticina que en los próximos cinco años, "dado el nivel actual de deuda soberana en relación con el PIB, la capacidad fiscal será más limitada que en el pasado, ya sea por la política o los mercados financieros, y limitará la capacidad de la política fiscal para suavizar futuras recesiones económicas".
"Seguimos pensando que la economía de EEUU se desacelerará en la segunda mitad de 2023 debido a un estancamiento en los préstamos bancarios, los efectos rezagados de la política monetaria y los obstáculos fiscales. Sin embargo, dado que el impulso de crecimiento inicial ahora parece más fuerte y los vientos en contra del sector bancario potencialmente más moderados, la probabilidad de una recesión a corto plazo también parece menor", destaca.
Sobre el efecto que la rebaja de la calificación puede tener en la renta fija estadounidense, apunta que es "poco probable" que "cambie significativamente las opiniones sobre los bonos del Tesoro de EEUU, pero las preguntas sobre la sostenibilidad de la deuda pueden aumentar con el tiempo".
"Si bien el movimiento de esta semana de Fitch Ratings es simbólicamente significativo y también tiene implicaciones prácticas para los mercados, no esperaríamos que desencadene una gran venta de bonos del Tesoro de EEUU ni un cambio a corto plazo en el comportamiento de los inversores", agrega.
A su juicio, los bonos del Tesoro "continúan siendo considerados la clase de activo libre de riesgo de referencia y actúan como un punto de referencia en los mercados financieros a nivel mundial". Además, desde la gestora tampoco prevén que la rebaja "afecte a la magnitud o la velocidad del ciclo de subida de tipos de la Reserva Federal en su lucha contra la inflación".
"Actualmente, somos ampliamente neutrales en cuanto a la duración de los EEUU, una medida del riesgo de la tasa de interés, y continuaremos ajustando el posicionamiento de la duración en función de nuestro rango de valor razonable", concluye.