Beka Finance ha nombrado a Miguel Arias Cañete, dos veces ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación y Comisario Europeo de Energía y Acción por el Clima, como presidente de honor del Comité de Inversión de su nuevo fondo de capital riesgo dedicado a la agricultura sostenible, Beka & Bolschare Iberian Agribusiness Fund, FCR.
Desde su nuevo cargo, Arias Cañete asistirá al equipo de profesionales de Beka Finance tanto en materia de cambio climático, sostenibilidad, compensación y comercialización de créditos de carbono, así como en la búsqueda y seguimiento de oportunidades de inversión. Y aportará una experiencia única a este proyecto pionero de inversión en agricultura sostenible de la entidad.
Según explica Beka, "a lo largo de dos legislaturas completas como ministro del Gobierno de España, y en 13 años en el Parlamento Europeo, Arias Cañete ha defendido los intereses del sector agrario español y ha contribuido a su modernización, a la mejora de su competitividad, al incremento de la renta del sector y al aumento de las exportaciones españolas de productos agrarios. Ha conseguido hitos tan relevantes como haber afrontado dos reformas de la Política Agraria Común (PAC) con resultados muy favorables para el campo español y haber conseguido un consenso entre las Comunidades Autónomas sobre la forma de su aplicación".
Beka añade que el sector de la agricultura se ha mostrado resiliente durante la crisis y está centrando el interés de los inversores. El campo español es un potente motor económico en plena transformación hacia la sostenibilidad y la innovación.
Beka & Bolschare Iberian Agribusiness Fund, FCR es un fondo de private equity dedicado a gestionar y explotar plantaciones agrícolas sostenibles en España y Portugal, lanzado por Beka Asset Management SGIIC en colaboración con Bolschare, uno de los operadores agrícolas más sofisticados de la Península Ibérica.
Este fondo busca contribuir a la optimización y modernización del sector, a través de la creación de centros eficientes de producción. Su modelo agronómico, permite mediante las tecnologías más avanzadas, optimizar los recursos hídricos, favorecer el uso de energías renovables, la absorción de CO2 y la generación de empleo en núcleos rurales.