"El pesimismo extremo favorece un rally alcista de corto plazo". Es la opinión de los expertos de Bank of America, cuyo indicador 'Alcista-Bajista' ha bajado hasta 0,4 veces, lo que indica un "sentimiento bajista extremo", que a su vez ha activado una clara señal de compra para el corto plazo.
¿Significa esto que el mercado bajista ha terminado? Para estos expertos, nada más lejos de la realidad. Porque incluso si el S&P 500 rebotara hasta 4.400 puntos, consideran que sería una clara oportunidad para "abrir posiciones cortas" o seguir reduciendo el riesgo en las carteras.
Los estrategas de Bank of America destacan que el Nasdaq ha conseguido rebotar un 11% desde los mínimos de mayo, y recuerdan que los rebotes alcistas dentro de mercados bajistas tienen una amplitud media del 18%, por lo que no descartan ver al índice tecnológico en 13.000 puntos este verano.
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Aunque al mismo tiempo señalan que "va a ser un verano de subidas de tipos de 50 puntos básicos y de endurecimiento monetario (QT)" (por parte de la Fed). En su opinión, el mercado bajista no terminará hasta que la Fed cambie su política monetaria, algo que no ocurrirá hasta que la economía americana comience a destruir empleo.
Para Bank of America, la reducción del balance del banco central retirará del mercado 3 billones de dólares en liquidez durante los próximos 18 meses, lo que pondrá fin "a la era del liderazgo tecnológico en los mercados bursátiles mundiales".
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Estos estrategas destacan que los precios de los alimentos han aumentado un 30% en un año, mientras el precio de la vivienda en EEUU ha subido un 21% y el precio del petróleo se ha duplicado, mientras los salarios han subido un 5%. "La inflación en la economía significa que los inversores deben esperar una Fed agresiva en los próximos 6 a 9 meses, a menos que los próximos datos de EEUU indiquen que ha comenzado una recesión", señalan.
Y aunque reconocen que el pesimismo extremo ha dado señal de compra a corto plazo, reiteran que abrirían posiciones cortas si el S&P 500 llega hasta 4.400 puntos. En su opinión, la advertencia de beneficios lanzada por Microsoft hace unos días "es la punta del iceberg" para los beneficios empresariales.
Por último, comentan que "el BCE cometerá un error de política clásico, el petróleo no muestra signos de que la estanflación haya terminado y la banca en la sombra es un gran factor negativo desconocido".