Finalmente, sí habrá cambio de marca para los clientes VIP. Self Bank pasa a llamarse a partir de ahora Singular Bank en su rama de asesoramiento financiero para los clientes con más de 500.000 euros, como ha anunciado el consejero delegado del banco, Javier Marín, en la presentación oficial del proyecto. El financiero afirma que la entidad tiene un ratio de solvencia del 20%, pero descarta entrar en beneficios hasta el tramo final de 2022.
Marín ha decidido darle un toque más personalizado al nuevo proyecto de banca privada que ha montado junto al capital riesgo Warburg Pincus. El eslogan de Singular Bank es “no es para todos, es para ti”. Por su parte, la marca Self Bank se mantendrá vigente para los clientes históricos del banco y la plataforma originaria, la cual “no va a cambiar nada” e, incluso, “será mejorada con nuevas herramientas de valor añadido”.
Marín heredó un negocio de 2.000 millones de euros con la compra de Self Bank. Tenía 1.000 millones de euros en fondos de inversión, 500 millones en depósitos y otros 500 millones en valores depositados. En los últimos cinco meses, ha incorporado a 41 banqueros privados tras haber realizado más de 400 entrevistas, y ya tiene oficinas físicas en Madrid, Sevilla y Zaragoza. Pese a este gran avance en tan poco tiempo, reconoce que “no estamos complacientes con lo que tenemos”. Su plan de negocio pasa por ir abriendo oficinas a medida que encuentren los equipos adecuados, y concreta que “tenemos vocación nacional, fundamentalmente urbano”.
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Self Bank se asocia con uno de los gestores de Alierta para lanzar fondos valueSingular Bank emprende el “camino contrario” al resto del sector, “de lo digital a lo físico”. “No vendemos productos, sino confianza y relación”, asegura el directivo. Marín cree adecuado “adaptar el banco al cliente y no al revés”, y afirma que “la tecnología ha pasado de ser un fin a un medio para darle una experiencia inolvidable al cliente”. En este sentido, considera que “es importante incorporar ciencia al proceso, cambiar el modo de relación con los clientes y ofrecer soluciones 360 grados”.
SALIDA A BOLSA
Como publicó Bolsamanía, Marín y Warburg Pincus pretenden sacar a bolsa el proyecto una vez pasados cinco años desde su puesta en marcha. Según ha adelantado, “primero tenemos que dar una propuesta de calidad y, luego, una propuesta de cantidad”, en referencia al salto al parqué. No obstante, es favorable a la idea del debut bursátil: “En España, un banco como el nuestro podría cubrir un hueco interesante. Sería predecible en generación de resultados y distribución de dividendos, y en estos momentos hay pocos bancos de este tipo, con un perfil conservador, cotizando en la bolsa”.
Su foco es crecer orgánicamente, pero estudiarán las operaciones corporativas que se le pongan por delante. “Va a haber oportunidades de consolidación en el sector, especialmente entre los jugadores pequeños”, augura Marín. También tiene en el horizonte salir a hacer negocio en el extranjero, aunque no ha dado más detalles al respecto y se muestra precavido: “Primero tenemos que consolidar el proyecto a nivel nacional”.
Un punto que ha destacado Marín es la solvencia del banco. “Vamos a mantener un ratio del 20% aproximadamente en los próximos años”, y subraya que hoy es “el más alto de la Unión Europea”. Sin embargo, descarta entrar en beneficios hasta finales de 2022. “Este año, perderemos dinero; el próximo, también, y a finales del siguiente, esperamos estar en beneficio”. Pese a ello, se muestra tranquilo: “No me preocupa perder dinero al principio, pero sí que lleguemos a los clientes potenciales y que nos perciban como un banco diferente a los demás”.