Bolsamanía ha cubierto en directo un nuevo cónclave monetario de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed), el banco central más poderoso del mundo.
Wall Street ha cerrado en positivo, aunque el S&P 500 no ha recuperado el nivel clave de los 3.800 puntos. El selectivo ha subido un 1,46%, hasta 3.790 enteros, por lo que se ha quedado ligeramente por debajo de este nivel, que puede actuar como resistencia en el corto plazo, lo cual sería negativo para el conjunto del mercado. La sesión de mañana, por tanto, con vencimiento trimestral de futuros y opciones sobre acciones e índices (cuádruple hora bruja), será determinante.
Y con este comentario cerramos este directo sobre la Fed. Un saludo y nos vemos en la próxima reunión de la Fed, prevista para el 27 de julio.
"La política monetaria más agresiva está aquí y la Reserva Federal está en llamas y decidida a hacer lo que sea necesario para reducir la inflación. Esta política monetaria agresiva es la mayor prueba para Wall Street, que se encuentra bajo una inmensa presión de venta y, lamentablemente, los datos económicos nos dicen que la situación está a punto de empeorar mucho", señala Naeem Aslam, analista jefe de AvaTrader
"La reacción del mercado no ha sido tan violenta, ya que muchos operadores esperaban que la Fed mostrara un lado aún más agresivo. En otras palabras, el aumento de la tasa de interés de 75 puntos básicos se había descontado".
"El S&P 500 se encuentra ahora en territorio de mercado bajista, por lo que es evidente que los inversores están comenzando a pensar lo impensable, que la política monetaria podría tener la posibilidad de alcanzar niveles vistos por última vez antes de la crisis financiera", afirma Laith Khalaf, director de análisis de AJ Bell.
"La dirección alcista de las tasas de interés y los rendimientos de los bonos estadounidenses es un cambio tectónico en los mercados de capitales, porque estos precios son el punto de referencia libre de riesgo para el conjunto del sistema. Como resultado, podemos esperar más emociones y movimientos en los mercados a medida que digieren el final de la era del dinero barato", añade este experto.
"Creemos que un aumento adicional de 75 puntos básicos en julio tiene una probabilidad menor del 50%, dadas nuestras previsiones macroeconómicas; y nos sorprendería ver 75 puntos básicos en septiembre. Los datos entrantes dejarán en claro que una acción tan agresiva es innecesaria. Esperamos que la Fed aproveche la oportunidad para retirarse de la exageración", concluyen desde Pantheon.
"Creemos que la inflación subyacente caerá más rápido de lo que piensan la Fed y los mercados, especialmente el PCE básico, por lo que esperamos que el frenesí de subidas de tipos se calme durante el verano, a medida que los datos de inflación, salarios y vivienda dejen en claro que la Fed no enfrenta la catástrofe que esperan algunos inversores y comentaristas".
Los expertos de Pantheon Macroeconomics comentan que "la Reserva Federal no puede hacer nada contra el aumento de los precios de la energía que eleva la tasa general de inflación, por lo que la única explicación económica para este desvío agresivo es que temen que las expectativas a largo plazo se desanclen. Las encuestas sobre las expectativas de inflación del consumidor han aumentado, pero el crecimiento de los salarios alcanzó su punto máximo el verano pasado y claramente se ha desacelerado en los últimos meses. Eso es mucho más importante, en nuestra opinión".
Finaliza la rueda de prensa con el S&P 500 por encima de 3.800 puntos y con subidas superiores al 2%.
"Estamos en un nuevo mundo de fuerzas inflacionarias y debemos buscar la estabilidad de precios", añade el presidente de la Fed.
"La guerra en Ucrania puede tener efectos potenciales durante años", afirma Powell. Este es uno de los factores que la Fed no puede controlar y que se está convirtiendo en una pesadilla para los bancos centrales de todo el mundo.
"Las condiciones financieras se han endurecido y eso es positivo, pero todavía estamos en un escenario de tipos bajos. El Comité considera que la política monetaria puede ser ligeramente restrictiva en el entorno del 3% al 3,4% a final de año", afirma Powell.
"Costará algún tiempo bajar la inflación, pero lo conseguiremos. La gente tiene que confiar en que tenemos las herramientas necesarias para controlar los precios". Parece más un deseo que una realidad en estos momentos de incertidumbre tan elevada.
"Siempre es un riesgo ir demasiado lejos, pero tenemos que reestablecer la estabilidad de precios", reconoce Powell al ser cuestionado sobre si el movimiento de la Fed es demasiado agresivo.
"La creación de empleo se desacelera, pero está en niveles saludables. La economía está en una posición fuerte y puede afrontar mayores tipos de interés", comenta el banquero central.
"Estamos viendo los mismos efectos sobre los precios en todo el mundo" debido a la subida de las materias primas, señala Powell. "La inflación general es lo que la gente siente en su bolsillo y el escenario se ha vuelto mucho más difícil en los últimos cuatro meses, aunque nosotros vigilemos la inflación subyacente", añade.
"No estamos tratando de provocar una recesión", responde Powell a una de las teorías más extendidas por el mercado, ya que muchos analistas consideran que provocar una recesión en EEUU es la única manera de bajar la inflación. Es obvio que Powell tampoco puede reconocer públicamente que quieran provocar una recesión, por otro lado.
"Muchos factores que no controlamos están en juego en estos momentos, como la evolución de la guerra en Ucrania. No va a ser fácil controlar la inflación en este entorno desafiante".
"No cantaremos victoria hasta que la inflación se vaya reduciendo. Sería muy cuidadoso a la hora de cantar victoria, aunque iremos actuando en función de los datos", añade Powell.
"Seguiremos así hasta que no veamos progresos en reducir la inflación", sentencia Powell, quien considera la situación actual "absolutamente excepcional".
"Estamos absolutamente determinados a controlar la inflación y esperamos llegar pronto a un área en el que consideremos que nuestra política es adecuada", dice Powell.
"La Fed cree que la subida de tipos de 75 puntos básicos es necesaria" para controlar la inflación, argumenta Powell.