Es habitual utilizar las reducciones y las deducciones en el IRPF como sinónimos, cuando en realidad se trata de conceptos fiscales diferentes.
Los dos ayudan a pagar menos impuestos en la renta, pero lo hacen de forma ligeramente distinta. Conocer las diferencias entre reducciones y deducciones te ayudará a entender mejor cómo funciona el IRPF y lo que puedes ganar con cada una de ellas.
Reducciones en el IRPF
Como su propio nombre indica, una reducción en el IRPF es un elemento que disminuye o minora la base imponible del IRPF.
Esta base imponible es la cantidad sobre la que se calcula el impuesto, que en la renta sería tu salario y el resto de ingresos que hayas tenido. Sobre esa base imponible se aplican una serie de reducciones por determinadas acciones o situaciones, que son las que darán lugar después a la base liquidable sobre la que se aplicarán los tipos de IRPF.
Para que lo entiendas mejor, nada como revisar las principales reducciones que se aplican sobre la base general del IRPF y que son:
- Reducción por tributación conjunta
- Reducciones por aportaciones y contribuciones a sistemas de previsión social
- Reducciones por aportaciones y contribuciones a sistemas de previsión social constituidos a favor de personas con discapacidad
- Reducciones por aportaciones a patrimonios protegidos de personas con discapacidad
- Reducciones por pensiones compensatorias y anualidades por alimentos
- Reducciones por aportaciones a la mutualidad de previsión social a prima fija de deportistas profesionales y de alto nivel.
Por ejemplo, la reducción por tributación conjunta resta 3.400 euros a la base imponible y 2.150 en las unidades monoparentales. A efectos prácticos, si la suma de todos tus ingresos es de 55.000 euros y optas por hacer la renta conjunta, la cantidad se reducirá a 51.600 euros.
Así es como funciona también la fiscalidad de los planes de pensiones. Si aportas 1.500 euros al plan de pensiones, será como si hubieses ganado 1.500 euros al hacer la renta.
La clave de las reducciones en el IRPF es que se aplican directamente sobre la base imponible para dar con la cuota íntegra del impuesto tras aplicar los tramos de IRPF.
Deducciones en el IRPF
Las deducciones también ayudan a pagar menos impuestos, pero se aplican en un momento diferente. En concreto, las deducciones fiscales se aplican sobre la cuota íntegra. Es decir, se trata de una minoración directa sobre la cuota íntegra.
Si con la reducción se reduce la base imponible, con una deducción se resta la cantidad a la cuota íntegra, que es lo que nos tocaría pagar en el IRPF o el resultado de aplicar el tipo de gravamen correspondiente a la base liquidable.
Una vez se aplican las deducciones en el IRPF, obtendremos la cuota líquida del impuesto, que es lo que realmente habrá que pagar en la renta.
Para que lo entiendas mejor, imagina que el resultado de la renta es de 1.000 euros a pagar a Hacienda, pero puedes aplicar la deducción por compra de vivienda habitual en su máximo de 1.350 euros.
El resultado de la renta en este caso pasaría a ser de -350 euros. Es decir, Hacienda te devolvería esa cantidad en el IRPF.
En la renta existen varios tipos de deducciones. Las estatales, que se aplican en todo el Estado, son:
- Deducción por inversión en vivienda habitual: Régimen transitorio
- Deducción por inversión en empresas de nueva o reciente creación
- Deducciones por incentivos y estímulos a la inversión empresarial en actividades económicas en estimación directa
- Deducciones por incentivos y estímulos a la inversión empresarial en actividades económicas en estimación objetiva
- Deducciones por donativos y otras aportaciones
- Deducción por rentas obtenidas en Ceuta o Melilla
- Deducción por actuaciones para la protección y difusión del Patrimonio Histórico Español y del Patrimonio Mundial
- Deducción por alquiler de la vivienda habitual: Régimen transitorio
- Deducciones por obras de mejora de eficiencia energética en viviendas
- Deducción aplicable a las unidades familiares formadas por residentes fiscales en Estados miembros de la Unión Europea o del Espacio Económico Europeo
A estas hay que sumar las deducciones autonómicas, que dependen de cada región. Aquí puedes consultar qué deducción en el IRPF puedes practicar en cada comunidad autónoma.
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