¿Es posible deducir un gasto sin tener factura? Los gastos deducibles son el caballo de batalla de todos los autónomos. Quien más y quien menos tiene clara la necesidad de justificar los consumos que después quiera incluir en IVA y en IRPF.
Por fortuna, existen una serie de gastos que se pueden deducir sin factura y sin riesgo a reprimenda por parte de Hacienda. ¡Vamos a ver cuáles son!
Qué gastos puedes deducir como autónomo
Más allá de la justificación mediante la factura, es importante recordar los requisitos para poder desgravar tus gastos como autónomo. Cualquier desembolso que pretendas incluir como gasto deducible en IVA o en el IRPF debe cumplir los siguientes requisitos:
- Estar directamente vinculado a tu actividad económica.
- Estar debidamente justificado (normalmente con factura).
- Estar registrado en la contabilidad.
Estas tres simples reglas dejan directamente fuera los gastos que no sean de tu negocio y los que no puedas justificar de forma documental de una u otra manera.
Qué gastos puedes deducir sin factura
La factura es el método más habitual para imputar los gastos que quieres desgravar. Sin embargo, hay gastos deducibles sin factura.
Se trata de gastos que podrás justificar sin ese documento como:
Cuota de autónomo
La Seguridad Social no va a emitir ninguna factura por tu cuota como autónomo, pero este es uno de los gastos deducibles la hacer la renta como autónomo.
Para justificar este gasto a desgravar sin factura puedes usar un extracto bancario o el boletín sellado por el banco.
Nóminas y salarios de los empleados
Otro gasto para el que no contarás con una factura al uso. Los salarios de los empleados se pueden justificar con las nóminas firmadas por los empleados o las transferencias bancarias.
Para los seguros sociales habrá que usar el cargo bancario o el TC sellado por el banco.
Gastos bancarios
Los gastos de mantenimiento de la cuenta, cuotas de las tarjetas o comisiones por tu operativa como autónomo también son un gasto deducible sin factura. La forma de justificarlos será a través de los extractos bancarios.
Gastos online y en el extranjeros
En un mundo globalizado, es muy habitual realizar compras online a otros países para tus suministros. Como con cualquier otra compra, se trata de gastos que debes justificar. La diferencia es que no necesitarás presentar una factura como tal.
Para acreditar gastos en el extranjero y compras online de fuera de España solo necesitarás un recibo o documento que justifique la operación.
Primas de seguros
Autónomo y seguros van de la mano. Dependiendo de tu actividad un buen seguro de responsabilidad civil puede ser imprescindible. Puedes deducir estos seguros en el IRPF. Para hacerlo necesitarás el extracto bancario que acredite el pago y la documentación relativa a la póliza, que te servirá para certificar que el seguro está relacionado con tu actividad.
Escrituras públicas, traspasos y contratos privados
Elevar un documento a escritura pública supone una serie de gastos que podrás desgravar en el IRPF y lo mismo ocurre con los contratos de traspaso o de fianza. En estos casos el propio contrato servirá de justificante junto con el extracto bancario que certifique el pago y su cuantía.
Impuestos
Como autónomo puedes desgravar muchos de los impuestos a los que debes hacer frente. Entre ellos figuran el Impuesto de Actividades Económicas (IAE), el IBI de tu local o el impuesto de circulación del coche. Dentro de los que no podrás desgravar están las sanciones, multas y recargos de Hacienda por no pagar a tiempo o por cometer cualquier infracción.
No justificar bien tus gastos es un error habitual que puede pasarte factura. Aquí puedes ver el resto de las sanciones más habituales a los autónomos.
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