La recta final del año es el momento de hacer números y cerrar cuentas. Todavía queda tiempo para ahorrar en la declaración de la renta si se llevan a cabo los movimientos adecuados. ¿Cuánto? Desde Gestha calculan que el ahorro puede alcanzar hasta 2.900 euros si sabemos aprovechar los cambios que trae la reforma fiscal.
El colectivo de técnicos del Ministerio de Hacienda, Gestha, estima que un contribuyente podría llegar a pagar hasta 2.900 euros menos en la declaración de la renta sólo con llevar a cabo una serie de medidas para aprovechar los cambios de la reforma fiscal y adelanta o atrasa operaciones en función de lo que sea más beneficioso.
Uno de los principales puntos a tener en cuenta es la deducción por alquiler de vivienda habitual como inquilino, que desaparece en 2015 para los nuevos alquileres. La desgravación media por el alquiler es de 212 euros y actualmente 870.512 personas se benefician de ella por un total de 185 millones, que es el dinero que deja de ingresar el Estado por este concepto. Así que ya sabes, si estás pensando en irte a vivir de alquiler, mejor hacerlo en 2014.
La bajada de tipos del ahorro también es una vía para ahorrar impuestos. Y es que no será lo mismo pagar por los 1.000 euros que hemos ganado en bolsa en 2014 que en 2015. El próximo año será más barato, así que en la medida de lo posible, será mejor aguantar las posiciones.
Además, en 2015 desaparecen las restricciones en cuanto a los periodos en los que compensar pérdidas con ganancias. Dicho de otra forma. en 2015 no importará si las ganancias se han generado a un año o más, algo que sí importa en 2014.
La vivienda, muy afectada
Pero sin duda el mayor hachazo según Gestha llegará en el plano inmobiliario. La desaparición de los coeficientes de actualización, que son los que actualizan el valor de la vivienda para ajustarla a la inflación y la limitación de los coeficientes de abatimiento hace que vender una casa en 2015 vaya a ser mucho más caro. Esto también afectará a otros elementos como fondos de inversión y acciones, que en caso de ser anteriores a 1994 -un caso muy raro- empezarán a contar contra el límite de 400.000 euros que se aplicará a los coeficientes de abatimiento.
Desde Gestha también precisan que las personas mayores de 65 años que obtengan ganancias patrimoniales y las reinviertan en formar una renta vitalicia estarán libres de pagar impuestos, algo que también pasará con los rendimientos de los trabajadores en el extranjero.
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Imagen – Karuka en Shutterstock
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