Cuando escuchamos la palabra seguro tendemos a pensar en el coche, la casa y nuestra salud. Sin embargo, también es posible invertir a través de este producto. Los seguros de ahorro e inversión son alternativas pensadas para el ahorro a largo plazo y que como tales, cuentan con importantes ventajas fiscales. ¡Os las descubrimos!.
Si has paseado recientemente por la calle o has encendido la televisión te habrás dado cuenta de que abundan los productos de ahorro a largo plazo, especialmente los planes de pensiones. Y es que se acerca la recta final del año y esta es la época en la entidades financieras y aseguradoras aprovechan para poner en liza este producto por su capacidad para hacernos pagar menos impuestos. Además, en en este último trimestre cuando mucha gente aprovecha para hacer balance del año de su vida y se da cuenta de que quizás no está ahorrando los suficiente para su jubilación.
A los tradicionales planes de pensiones se les han unido en los últimos tiempos una serie alternativas por parte del sector asegurador. Habitualmente pensamos en un seguro como una fórmula para cubrir una contingencia, un imprevisto que de otra forma no podríamos afrontar en términos económicos, pero ahora pueden ir más allá. Los seguros de ahorro han evolucionado hasta convertirse en verdaderos vehículos de inversión donde al final el seguro es lo de menos.
Pero más que de seguros de ahorro exclusivamente, en este caso vamos a tratar la fiscalidad de los productos que comercializan las aseguradoras, dentro de las que se encuentra el tradicional seguro de ahorro. Entre la oferta figuran tres opciones: unit link, PPA y PIAS y dentro de poco, el Plan Ahorro 5 en su modalidad de seguro de ahorro.
¡Empecemos con el repaso!
Unit Linked
Un Unit Linked es un seguro que básicamente da acceso a una cesta de fondos de inversión entre los que el usuario puede elegir los que más le conviene y cambiar la composición de acuerdo con sus necesidades. En cierto sentido un unit linked es una alternativa a crear una cartera de fondos tradicional, eliminando la capacidad de elegir libremente y dejando que sea la entidad quien acote los fondos disponibles. Y como no podía ser de otra forma, parte del dinero que se aporta anualmente en concepto de prima -recuerda, es un seguro- se destina a un seguro de vida que pagará una cantidad pequeña en caso de fallecimiento del partícipe.
Aclarado este punto, ¿Cómo tributan los Unit Linked? Pues básicamente como un seguro de vida. De esta forma, en caso de fallecimiento, el beneficiario o heredero cobrará la indemnización y además recibirá el dinero de las inversiones, por el que tributará en el Impuesto de Sucesiones y Donaciones. Si sobrevive, como espera la mayoría, el dinero acumulado se integrará con el resto de ahorros y tendrá la consideración de rendimiento de capital mobiliario a efectos de IRPF. Al hacerlo, tributará en función de los siguientes tramos:
Conviene recordar que, como ya ocurre cn los fondos de inversión o las acciones, las pérdidas podrán compensarse con las ganancias. ¿Quieres más información? Aquí tratamos el asunto más en detalle.
Nota: Descubre aquí el truco para ahorrar el 20% de tu sueldo sin esfuerzo.
PIAS
Los PIAS o Planes Individuales de Ahorro Sistemático son quizás el producto más clásico en lo que a planes de ahorro se refiere. Su funcionamiento es muy sencillo, es un plan de ahorro articulado en torno a un seguro de vida en el que los titulares se comprometen a realizar aportaciones al plan a cambio de una rentabilidad mínima pactada y que generalmente se complementa con una parte variable. De hecho, en los últimos tiempos han crecido PIAS con un perfil más agresivo y para perfiles más avezados.
A diferencia de lo que ocurre con otros productos, se podrá retirar el dinero al cabo de dos años, si bien la mayor parte de los planes ofrecen bonificaciones para que el cliente no abandone. Además, es necesario conservar 10 años la inversión para disfrutar de las ventajas fiscales -la reforma fiscal lo deja en cinco a partir de 2015-. Actualmente estas ventajas se traducen en una serie de reducciones sobre el capital por el que se tributará ligadas a la edad en el momento del rescate:
- Menores de 40 años: 40%
- Entre 40 y 49 años: 35%
- Entre 50 y 59 años: 28%
- Entre 60 y 65 años: 24%
- Entre 66 y 69 años: 20%
- Mayor de 70 años: 8%E
En caso de cancelar el plan antes de diez años, las ganancias tributarán dentro de la base imponible del ahorro según las tablas que ya vimos para los Unit Linked.
Las primas anuales no podrán superar los 8.000 euros al año.
¿Es para ti un PIAS?
Los PIAS son un buen producto de inversión a largo plazo. ¿Quieres saber si son para ti? Habla con un experto en finanzas para averiguarlo. Deja tus datos en el formulario y enseguida se pondrán en contacto contigo para poder concertar la primera cita totalmente gratuita.
¿Si te has quedado con dudas? En este post tienes más información sobre cómo tributan los PIAS
PPA
Los Planes de Previsión Asegurados o PPA son los ‘primos-hermanos’ de los planes de pensiones. Tanto es así que su fiscalidad es idéntica y la única diferencia radica en que los PPA están obligados a garantizar el capital y un beneficio mínimo, por lo que la rentabilidad que ofrecen es mucho menor. A partir de ahí, todo son similitudes.
Como ocurre con los planes de pensiones, los PPA ofrecen ventajas en el momento de las aportaciones pero una fiscalidad peor al rescate.
Reducciones en el IRPF por el dinero aportado
Esta es la gran baza fiscal de los PPAs y de los planes de pensiones: con ellos se puede pagar menos impuestos porque reducen la base imponible en función de lo aportado. Para la renta de 2014 se aplicarán los siguientes límites:
- Menores de 50 años: hasta 10.000 euros o el 30% de su base imponible
- Mayores de 50 años: hasta 12.500 euros o el 50% de su base imponible
A partir de 2015, la reforma fiscal termina con estas distinciones, limitando a 8.000 euros las aportaciones que pueden hacerse a un PPA y que darán lugar a reducciones en la base del IRPF.
El rescate, como renta del trabajo
El dinero del PPA se puede recuperar en forma de capital -todo o parte de golpe-, como renta o como una mezcla de ambas. En cualquier caso, al hacer las ganancias y el dinero aportado se integrarán con las rentas del trabajo, por lo que tributarán como antes lo hacía nuestro sueldo, al tipo que marquen las tablas de IRPF.
Actualmente, el PPA sólo puede rescatarse al alcanzar la jubilación o cuando se produzca alguno de los supuestos marcados por ley, que son el paro de larga duración y la incapacidad. Si no se da uno de estos casos, no se podrá tocar el dinero. La reforma fiscal termina con este problema de liquidez y a partir de 2015 se podrán rescatar las aportaciones que se realicen pasados 10 años. De esta forma, si aportásemos 8.000 euros en 2015, éstos se podrían recuperar en 2025, los 8.000 euros aportados en 2016 en 2026 y así sucesivamente.
De nuevo, si necesitas más información, tenemos un artículo específico sobre la fiscalidad de los PPA.
Plan de Ahorro 5
El último invento del ejecutivo para fomentar el ahorro a largo plazo. Los planes de ahorro 5 o Plan de Ahorro a Largo Plazo, que es su nombre oficial, se pueden articular en torno a una cuenta corriente, como ya se hacía en su día con la cuenta ahorro vivienda, o en torno a un seguro de vida–ahorro. En este sentido su funcionamiento será como el de un seguro de vida al uso pero en el que sólo el 85% del capital estará asegurado y donde las aportaciones no podrán superar los 5.000 euros al año.
Existen ventajas fiscales para los Planes de Ahorro 5 siempre que la inversión se mantenga durante 5 años, en cuyo casi estará exenta del pago de impuestos. En caso contrario, se integrará con el resto de rentas del ahorro y tributará a los tramos mencionados en el primer apartado.
Así es como funciona la fiscalidad de los productos de ahorro ¿Quieres saber también cuánto dinero se queda Hacienda de tus inversiones para la jubilación? ¡También te lo contamos aquí!
Imágenes – Shutterstock
¿Algo que añadir? ¡No te cortes!