2016: Un año de desafíos para Chile

La presidenta Bachelet debe lidiar con su baja popularidad

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Bolsamania | 01 ene, 2016

El Caso Caval, que vinculó a al hijo de la Presidenta Bachelet en tráfico de influencias; el financiamiento de campañas políticas por parte de las empresas Penta y SQM; la colusión del papel higiénico y el descontento de la población con la clase política son sólo parte de lo que nos deja el 2015.

Alfredo Coutiño, director de Moody´s Analytics y columnista del diario electrónico El Mostrador, comenta que remontar el crecimiento y abatir la inflación representa un doble desafío para las autoridades chilenas.

Remontar el crecimiento y abatir la inflación representa un doble desafío para las autoridades chilenas

Primero, una vez que la economía ha demostrado que su debilidad es estructural y no coyuntural, el reto está en poner en marcha un conjunto de medidas que constituyan una solución estructural.

Esto implica fortalecer la fuente más importante del crecimiento permanente y estable: la acumulación de capital, lo cual trae consigo el impulso a la productividad y el avance tecnológico. Para esto se necesita estimular la inversión productiva en capital físico y humano, sobre todo del sector privado.

“Segundo, se requiere mejorar el clima de negocios y fortalecer la credibilidad y confianza tanto del sector privado como de los mercados. En esto es fundamental el regreso a la disciplina macroeconómica, la cual parece haberse descuidado. La prolongación de la expansión fiscal y monetaria no solo ha probado ser inefectiva para resolver la debilidad estructural sino que incluso ha generado distorsiones internas y externas. Por lo tanto, el país precisa de regresar a la disciplina para restaurar la salud económica”, agrega Coutiño.

Salud económica que va de la mano del cobre, que en 2015 registró niveles históricos, y que hoy depende de China, uno de los principales socios comerciales de Chile.

ELECCIONES 2016

En octubre se realizarán las primeras elecciones municipales bajo el sistema de voto voluntario, lo que no tiene un buen antecedente si pensamos en las presidenciales donde votó menos del 40% del padrón electoral con derecho a sufragio.

Según Claudio Fuentes, cientista político de la Universidad Diego Portales “no existen movimientos que hagan cambiar el pensamiento de la gente, que hoy no está conforme con el manejo de la clase política”.

Las encuestas son esquivas para la Presidenta, el Gobierno, el oficialismo y también la oposición, quienes deben pasar la gran prueba a fin de año. La mayoría de los analistas se pregunta si las personas están dispuestas a votar si ya no creen en quienes los representan.

Y más importante aún, si Michelle Bachelet podrá revertir lo que fue 2015, catalogado por ella misma como el “peor año” de sus dos gobiernos.

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