Bachelet llama a respetar los tratados internacionales en medio de una disputa territorial con Bolivia
La Presidenta de Chile participó en la 70 Asamblea General de las Naciones Unidas.
La Presidenta de Chile, Michelle Bachelet, llamó ante la Asamblea General de las Naciones Unidas a respetar los tratados internacionales "como una garantía de la paz y estabilidad", en medio de una disputa territorial que mantiene con Bolivia ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya.
Lee más: Bachelet ante el fallo en La Haya: "Bolivia no ha ganado nada"
"Todos tenemos de velar por el buen funcionamiento del sistema internacional", ha agregado la mandataria chilena, que ha insistido en que el apego al derecho internacional "requiere respetar lo pactado, así como no hacer un uso indebido de los mecanismos que hemos diseñado para resolver pacíficamente las diferencias que realmente pudiesen existir".
La decisión de la CIJ de continuar con el juicio ha sido calificada como un triunfo histórico en Bolivia, mientras que en Chile estiman que La Haya acotó el caso al enfocarse en si el país tiene o no la obligación de negociar una salida al mar.
En este contexto, y poniendo como ejemplo el restablecimiento de las relaciones diplomáticos entre Estados Unidos y Cuba, Bachelet ha señalado que "Chile alienta los caminos del diálogo y del respeto del derecho internacional como la forma civilizada en que los países deben resolver sus diferencias.
De la misma forma, se ha referido al avance en los diálogos de paz entre el Gobierno colombiano y la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) para afirmar que "con voluntad hay posibilidad de llegar a un acuerdo". "Colombia y su pueblo cuentan con nuestro acompañamiento activo en este proceso, que confiamos que lleve a una paz duradera", ha apostillado la jefa de Estado de Chile.
Ante los principales líderes mundiales, Bachelet ha recordado que Chile es un país que ha intensificado su papel en el sistema multilateral. "A la luz de esta última experiencia (como miembro no permanente del Consejo de Seguridad en 2014 y 2015), queremos reafirmar nuestra convicción sobre la necesidad de reformar el Consejo, ampliando el número de sus miembros permanentes y limitando el veto, al menos, cuando se trate de crímenes de lesa humanidad", ha recalcado.
"Es una reforma necesaria, en línea con lo mucho que ha avanzado el sistema multilateral y que, sin duda, le otorgaría mayor legitimidad al órgano más importante de Naciones Unidas", ha sentenciado.