El 18% de los 'menas' llegados a Cataluña desde 2016 han sido detenidos o investigados

Per

Europa Press | 03 mai, 2019

Los Mossos activan un plan de asistencia a menores extranjeros y prevención

BARCELONA, 3 (EUROPA PRESS)

El 18% (1.011) del total de menores extranjeros no acompañados (menas) que han llegado a Cataluña entre 2016 y 2018 (5.622) han sido detenidos o investigados al menos una vez, principalmente por hurtos de menos de 400 euros, según datos de los Mossos d'Esquadra.

En un comunicado este viernes, la policía catalana ha informado de que algunos de estos menores ya deben de ser mayores de edad en la actualidad, y que un 82% no ha entrado en contacto con la delincuencia.

Con la voluntad de "proteger a estos menores y establecer todos los mecanismos para evitar que estos acaben generando problemas de inseguridad", los Mossos han activado en la Región Policial Metropolitana Barcelona el Pla d'Acció Polièdric (PAP).

"Con su nombre pretende dibujar las numerosas caras que puede llegar a tener" el fenómeno de los menores extranjeros no acompañados y las formas de trabajar con este colectivo que consideran vulnerable porque puede acabar delinquiendo o incluso ser víctima de grupos criminales.

La llegada de estos menores a Cataluña y, especialmente, a Barcelona los últimos años ha supuesto una novedad que "se aborda desde diferentes vertientes y de manera transversal por parte de diferentes instituciones del país", como la Fiscalía de Menores, la Dirección General de Atención a la Infancia y la Adolescencia de la Generalitat (Dgaia), el Ayuntamiento de Barcelona, la Guardia Urbana y los Mossos.

EVITAR EL CONTACTO CON DELINCUENCIA

El cuerpo policial catalán puso el PAP en marcha el 1 de marzo y persigue "evitar que los menores entren en contacto con el mundo delincuencial, sea en calidad de víctimas o autores, así como mejorar la seguridad en general".

El plan tiene un componente asistencial, para que los menores no salgan del circuito de protección ofrecido por la Administración y siempre sean dirigidos a sus centros de tutela.

La finalidad es controlar e identificar a los que pernoctan en diferentes puntos de la ciudad y trasladarlos a la administración para su protección, especialmente en casos de "menores de 14 años y aquellos que están en situación de riesgo porque han tenido contacto con el consumo de sustancias estupefacientes o inhalaciones de sustancias disolventes con efectos narcóticos".

También se busca la prevención al reducir la presencia de estos menores en la calle y "evitar que algunos de estos estén cometiendo hechos delictivos, principalmente contra el patrimonio, como hurtos, robos violentos, robos con fuerza en interior de vehículos y en el interior de domicilios".

"El control de estos menores también pretende evitar posibles peleas y agresiones que se producen entre ellos", añaden los Mossos.

Últimas noticias