Esto es lo único que hay que saber sobre el mercado de valores en este momento, dice un veterano inversor

La reciente corrección de los mercados no asusta al estratega de mercado de Capital Wealth, Jeffrey Saut, quien aporta casi 50 años de experiencia y se ha mantenido fiel a su recomendación alcista durante años. Sautpredice un nuevo máximo para el S&P para fin de año, con un mensaje para cualquier inversor nervioso: "Es un mercado alcista".

Saut mantiene lo que dijo en octubre del año pasado, que las acciones están en manos de un mercado alcista secular que comenzó en marzo de 2009. Se refiere a una tendencia de larga duración que puede durar hasta 25 años, pero a menudo está marcada por mercados bajistas más pequeños: los mercados bajistas seculares funcionan al revés.

Al mercado alcista secular actual le quedan entre cuatro y nueve años, lo que significa que los inversores no pueden darse el lujo de salir del mercado, dijo. Y tienen buena compañía, ya que Saut señala que incluso los profesionales se han quedado fuera de la subida desde los mínimos de marzo, con 3 billones de dólares esperando a entrar.

El problema en este momento es que, como pocos han experimentado un mercado alcista secular, el último fue de 1982 a 2000, la mayoría no puede entender lo que está sucediendo, dice Saut.

"Creo que estamos alcanzando un techo de corto plazo a mediados de junio, pero podría ser que realmente no retroceda y solo se consolide y el mercado se mueva lateralmente, y después veamos un nuevo tramo alcista a máximos de históricos", dice, y agrega que esos nuevos máximos probablemente lleguen en diciembre.

Saut ha realizado algunos pronósticos bastante visionarios en el pasado, como el "descenso en cascada" que predijo para las acciones solo un mes antes del colapso de octubre de 1987.

En este momento, cree que el mercado tiene mucho que ofrecer: toneladas de demanda acumulada para la economía debido a bloqueos, una recuperación en forma de V y una probable victoria del presidente Donald Trump en las elecciones de noviembre. En cuanto a los riesgos, dice que no se puede descartar una segunda ola del virus o un error político de Washington.