¿Y si Europa se viera favorecida de la batalla comercial de Trump con China?

Tras las fuertes caídas del pasado viernes en Wall Street y después de las vacaciones de Semana Santa, hoy los inversores europeos han seguido reduciendo su exposición a la renta variable lo que ha llevado a los indicadores del viejo continente a descensos generalizados, aunque en menor medida de lo que se podía prever después de los fuertes descensos de Wall Street del pasado viernes.

Las tensiones comerciales entre EE.UU. y China, que algunos analistas hablan de que podría desembocar en una confrontación armada, junto con la mala evolución del sector tecnológico, ha provocado esta ola de pérdidas en la renta variable de todo el mundo.

La sesión comenzaba con el ligero cierre bajista de los mercados asiáticos, el índice MSCI de Asia y Pacífico sin Japón cerraba con un descenso del 0,35%, y la apertura también a la baja de las bolsas europeas aunque en un porcentaje bastante menor que el que se temía tras el desplome del viernes de Wall Street.

Si Wall Street no rebota los inversores podrían creer que estamos ya en tendencia bajista.

"Los mercados están siendo apoyados por el crecimiento global, la mayoría de los indicadores que han salido recientemente son bastante sólidos. Las cabezas frías están prevaleciendo ", afirmaba Shane Oliver, estratega jefe de inversiones de AMP Capital.

Esta mañana se conocían importantes datos macroeconómicos en Europa, entre los que destacaríamos los PMIs manufactureros de marzo. En la euro zona el dato se ajustó a las previsiones. El indicador del sector manufacturero sigue claramente por encima del nivel que indica expansión (50), aunque mejoró al ritmo más lento en los últimos ocho meses. Destacaríamos en el lado negativo el PMI de Francia e Irlanda en mínimos de 12 meses.

Chris Williamson, encargado de elaborar el dato, afirmaba: “El índice PMI manufacturero de marzo registró la mayor caída desde junio de 2011 y su ritmo de expansión se ralentizó por tercer mes consecutivo. No deberíamos preocuparnos demasiado por la caída del índice PMI ya que era inevitable cierta ralentización en el ritmo de crecimiento tras el alza observada a comienzos del año”

Los mercados de valores europeos no reaccionaron ante este dato. A media sesión el Eurostoxx 50 caía un 0,40%. El Ibex 35 -0,47%. Los futuros de Wall Street cotizaban con moderados descensos tras las fuertes caídas del viernes. Un rebote que era esperado por los inversores.

“Es muy importante que hoy Wall Street rebote. De no hacerlo, el desánimo de los inversores podría incrementarse y considerar que realmente estamos ya en tendencia bajista. Las caídas se acelerarían", nos comentaba un operador esta mañana.

Y Wall Street rebotaba en apertura. El Dow Jones subía un 0,36%, el S&P 500 un 0,43% y el Nasdaq un 0,63%. Sin embargo, tras esos primeros minutos de contratación las palabras de Donald Trump en contra de la compañía Amazon penalizaban al conjunto del sector tecnológico que volvía a terreno negativo. Los descensos fueron puntuales, y el dinero entró de nuevo con fuerza en Wall Street y llevaba a los selectivos a alzas por encima del punto porcentual. Esto fue aprovechado por los inversores europeos para anular casi por completo las pérdidas de todo el día. Al cierre el Eurostoxx 50 caía menos del medio punto porcentual.

En resumen, jornada con cierta fortaleza relativa en los mercados de valores del viejo continente, que no se han dejado llevar por el desplome del viernes de Wall Street, y por el puntual cambio de signo tras la apertura del mercado americano.

“Parece que está volviendo a entrar dinero a Europa. Hay que tener una cosa en cuenta, si la guerra comercial entre EE.UU. y China se recrudece, y si no hay extensión a otras economías, los grandes beneficiados serán las compañías europeas que podrán exportar con mejores condiciones tanto a EE.UU. como a China. Eso es algo que creo que los inversores mundiales están empezando a considerar”, nos comentaba un gestor nacional minutos antes del cierre.