El S&P 500 continúa avanzando al alza a medida que disminuyen los temores de una reaceleración de la inflación y una Fed de línea dura. ¿Qué sigue?

El S&P 500 ha estado subiendo de manera constante desde la semana pasada debido a una decisión del FOMC más moderada de lo esperado, en la que la Reserva Federal decidió señalar una mayor reducción del QT a partir de junio y el presidente de la Reserva Federal, Powell, rechazó repetidamente las expectativas de subida de tipos.

Además, los datos del viernes mostraron que la Reserva Federal podría efectivamente mantener las tasas más altas por más tiempo a medida que el crecimiento del empleo y los salarios se debilite. Todo lo anterior respalda al mercado en el corto plazo a medida que el posicionamiento agresivo se relaja un poco.

En el gráfico diario podemos ver que la corrección mayor hacia el nivel 4834 podría haber quedado invalidada por el momento. El S&P 500 rebotó alrededor del nivel 5000 cuando obtuvimos dos catalizadores positivos de la decisión del FOMC y los datos más débiles del NFP de EE. UU. El camino de menor resistencia sigue siendo alcista con nuevos máximos históricos a la vista.