Escala hasta máximos históricos del S&P 500. ¿Entusiasmo sostenible?
El máximo histórico del S&P 500 no refleja ninguna bonanza económica. "El más mínimo cambio en perspectivas” podría provocar una caída del índice de más de un 10% Cautela en renta variable americana A favor de la renta variable europea y japonesa en 2017 El benchmark del S&P 500 cerró en 2258.07 el viernes pasado, a apenas 0.6% de su máximo histórico. Esto indica que las acciones estadounidenses estarían entrando otra vez en un nuevo territorio.
Normalmente este escenario debería estar correlacionado con un alto crecimiento, inflación y euforia, pero en esta ocasión no es así.
El crecimiento sigue en modo silencio
Aunque hay muchas señales de que las cosas estén mejorando y que la inflación esté en el horizonte, la foto más amplia que tenemos sobre la economía de EE.UU. muestra que sigue creciendo por debajo de la tendencia y que incluso este crecimiento por debajo de la tendencia ha sido el más largo desde la gran crisis financiera...
Además de una economía que está saliendo del paso, a los inversores no se les presentan tiempos de mejoría con una inflación a la vuelta de la esquina. Este mercado alcista sigue siendo uno de los ejemplos tipo más odiados y cuenta con los niveles de participación más bajos.
A nivel global, los mercados financieros han reaccionado de manera positiva a la victoria del presidente electo en Estados Unidos, Donald Trump, y sus visiones sobre políticas fiscales - las pueda o no llevar a cabo. A nadie parece importarle que sus políticas no afectarán directamente la economía hasta después de septiembre de 2017 (debido a que el año fiscal actual del gobierno de los EEUU está ya establecido). (Leer más)