Ventajas de la flexibilidad laboral en las empresas
El bienestar de los trabajadores no consiste únicamente en disponer de un salario suficiente, también es importante tener facilidades para conciliar el trabajo y la vida personal. Según el estudio «Employer Brand Research, 2021» de Randstad, el 66% de los españoles en edad de trabajar considera que la flexibilidad laboral es un factor de peso para sentirse motivados en sus puestos y lo sitúan en el segundo lugar entre los cinco criterios más importantes a la hora de incorporarse a una empresa.
¿En qué consiste la flexibilidad laboral?
No hay un consenso absoluto en la definición de “flexibilidad laboral”, pero básicamente se trata de buscar un equilibrio entre los intereses de la empresa y los del trabajador. Esto se logra mediante la implementación de políticas que faciliten la conciliación y ofrezcan a los empleados la capacidad de elegir ciertas características de su puesto, como el horario de entrada y de salida, o la posibilidad de trabajar a distancia.
Un nuevo modelo basado en objetivos
La pandemia de COVID-19 no se limitó a acelerar la digitalización de las empresas, también trajo consigo un cambio de paradigma en todo lo relacionado con los modelos de trabajo y la gestión de los recursos humanos.
Frente al modelo tradicional que priorizaba el cumplimiento de un horario rígido, en el modelo empresarial actual lo más importante es la consecución de objetivos.
Pasar muchas horas sentados en la oficina no significa necesariamente rendir más o ser más eficientes. De hecho, en la mayoría de los casos, estas jornadas maratonianas sólo logran desmotivar al personal y generar descontento dentro de la empresa.
Surge así el término “Flexiworking” para referirse a una nueva filosofía del trabajo basada en objetivos y que valora el talento por encima de la cantidad de horas trabajadas.
Medidas para impulsar la flexibilidad laboral en la empresa
En el año 2006 los profesores Eva Rimbau Gilabert y Xavier María Triadó i Ivernse hicieron una clasificación de cuatro tipos diferentes de flexibilidad laboral.
· Flexibilidad salarial: por ejemplo, posibilidad de elegir el día de pago o de prorratear las pagas extra. Según la filosofía de la empresa, podrían establecer también un sistema de bonificaciones basado en objetivos.
· Flexibilidad en el espacio de trabajo: posibilidad de trabajar en la oficina o de forma remota (teletrabajo). También se puede optar por un modelo híbrido en el que la jornada laboral se reparte entre el trabajo a distancia y en las instalaciones de la empresa.
· Flexibilidad de plantilla: ante determinadas circunstancias financieras la empresa puede aumentar o reducir su personal. También es posible cambiar la duración de las jornadas para ajustarse a los requerimientos de producción.
· Flexibilidad funcional: los empleados no están vinculados a un puesto específico y los equipos se diseñan de forma dinámica teniendo en cuenta las habilidades de cada individuo y las necesidades que surgen en cada proyecto. En mundo empresarial esta metodología se conoce como “Multitasking” y para que funcione correctamente es imprescindible hacer una evaluación por competencias. De lo contrario, podrían darse muchos errores y una gran desorganización interna.
Además de estos cuatro tipos de flexibilidad laboral que mencionan Rimbau y Triadó, en el ecosistema laboral de 2023 reconocemos otras medidas de trabajo flexible.
· Flexibilidad horaria: permitir a los trabajadores elegir libremente el horario de entrada y de salida siempre que cumplan con las horas acordadas en su contrato.
· Trabajo compartido: repartir el trabajo entre dos o más empleados a tiempo parcial.
· Semana comprimida: es posible trabajar más horas algunos días para disfrutar de algún día libre en la semana (por ejemplo, trabajar de lunes a jueves y librar los viernes).
· Elegir las vacaciones: permitir a los empleados decidir la fecha en la que podrán disfrutar de sus vacaciones siempre que se respeten las políticas de la empresa.
¿Por qué apostar por un modelo de trabajo flexible?
Cada vez son más los empresarios que se preocupan por ofrecer ciertas medidas de flexibilidad laboral a sus empleados. Desde el inicio de la pandemia hasta el momento actual se han realizado varias investigaciones que evidencian las ventajas de permitir la conciliación familiar, tanto para los trabajadores como para las empresas.
Retener el talento
En un entorno empresarial tan competitivo como el actual, retener el talento se ha convertido en una prioridad para muchos gerentes de negocios.
Si los empleados están desmotivados o sometidos a un gran estrés laboral, lo más probable es que se terminen marchando si encuentran algo mejor o su paciencia se agota. Aumentar la flexibilidad laboral disminuye la rotación y los costes que conlleva la reclutación y formación de nuevos trabajadores cualificados.
Mejorar el clima laboral
Los horarios excesivos tienen un impacto negativo en la salud y suelen aumentar el nivel de estrés y ansiedad en los trabajadores. Los horarios flexibles contribuyen a generar un buen clima laboral y se relacionan con un número menor de conflictos.
Aumentar la productividad
Según un informe de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) las medidas de flexibilidad laboral repercuten en "un mejor funcionamiento de las empresas, aumento de la productividad y descenso de los costes salariales".
Por lo general los trabajadores son más eficientes cuando gozan de un equilibrio saludable entre la vida personal y laboral. Además, disponer de más tiempo libre les permite seguir formándose y mantenerse actualizados en sus puestos.
Reducir costes
Algunas medidas como el teletrabajo pueden significar un ahorro en gastos fijos de la empresa como puede ser el alquiler de oficinas o los suministros. También reduce el impacto ambiental que produce el desplazamiento diario a las oficinas y las emisiones de CO2 a la atmósfera.
Dificultades a la hora de implementar medidas de flexibilidad laboral
A pesar de las ventajas de un modelo de trabajo flexible, es cierto que podrían presentarse algunos desafíos en el camino. Por ejemplo, los trabajadores en remoto podrían relajarse y no gestionar bien el tiempo. También es posible que surjan dificultades para trabajar de forma coordinada en equipo. Además, la falta de contacto personal puede debilitar las relaciones con los compañeros y superiores afectando al ambiente de trabajo.
Otras veces la infraestructura de la empresa no está preparada para implementar estas medidas por una digitalización insuficiente o falta de formación de los empleados. Por esta razón las medidas de flexibilidad laboral deberían integrarse dentro de un plan estratégico de RR.HH. que tenga en cuenta aspectos como la capacitación y el desarrollo de habilidades digitales, la promoción de una cultura de confianza o el fomento de la comunicación, organizando reuniones virtuales y presenciales siempre que sea posible.