7 consejos para elegir un buen abogado
A lo largo de la vida, podemos enfrentarnos a diferentes asuntos legales, para los cuales deberemos contar con la ayuda de un abogado. En este momento es posible que, con las prisas y la presión de la situación, hagamos una búsqueda rápida, tirando de cocidos o buscando al abogado con los precios u honorarios más bajos.
Sin duda, esto es un completo error. Los abogados son los profesionales encargados de asesorarnos, acompañarnos y defender nuestros intereses a lo largo de estos procesos tan complicados. Por eso, es importante que cuenten con una serie de características y que sean las personas más adecuadas para prestarnos este servicio.
Independientemente de si el asesoramiento jurídico que necesitamos es en forma de consejo legal o para llevarnos un caso a juicio, es necesario elegir a un abogado capaz de velar por nuestros intereses de forma eficaz. Además, debe ser un profesional con experiencia en la resolución de consultas o problemas como el nuestro.
Teniendo en cuenta todo esto, es posible pensar que elegir a un buen abogado es realmente difícil. Sin embargo, existen algunos consejos que pueden ayudarnos bastante a encontrar al profesional perfecto para nuestro caso. A continuación, repasamos los más importantes.
1. Dale importancia a la especialización
En la actualidad, los profesionales del derecho están muy segmentados en función de la rama en la que están especializados. Por eso, a la hora de contratar a un abogado, es importante saber si está especializado en el ámbito al que pertenece nuestro caso.
En algunos despachos como, por ejemplo, G.Elías & Muñoz Abogados, cuentan con profesionales especializados en distintas ramas. Sin embargo, otros están especializados en una única materia. Por eso, antes de acudir a un abogado o despacho, hay que informarse sobre cuáles son las ramas del Derecho en las que están especializados.
Por ejemplo, si nuestra consulta es sobre Derecho de Familia, necesitaremos un abogado especializado en este tipo de Derecho Civil. Estos profesionales son los más capacitados para defender nuestros intereses en custodias, divorcios, herencias, etc.
2. Desconfía de los abogados excesivamente baratos
Aunque el precio es uno de los aspectos más importantes en la elección de un abogado, es importante desconfiar de aquellos que ofrecen consultas gratuitas u honorarios excesivamente baratos. Contratar a un mal profesional elegido por estos atractivos, puede terminar saliéndonos muy caro.
Los buenos abogados, al igual que los buenos médicos, han invertido tiempo y dinero a lo largo de su carrera para adquirir esos conocimientos y esas habilidades que les hacen destacar sobre los demás. Por lo tanto, si un abogado es demasiado barato, es posible que se trate de un profesional poco experimentado o con una formación muy pobre.
3. Olvídate de amigos y conocidos
A la hora de contratar un buen abogado, debemos olvidarnos de contratar amigos, conocidos o familiares. En un proceso tan importante como este, es importante guiarse por otras características más allá de los lazos familiares o afectuosos.
Por otro lado, debemos tener en cuenta que, al haber una relación de amistad por medio, es posible que el trato con el abogado no sea tan profesional o que el exceso de confianza dificulte el proceso.
4. Habla con varios abogados antes de contratar a uno
Dar con un buen abogado a la primera puede resultar realmente difícil. Por eso, si todavía no tenemos un abogado de confianza, lo mejor es hablar con varios abogados y, en función de la sensación de confianza que nos dé, su experiencia, su especialización, su calidad humana y sus honorarios, elegir al más adecuado.
5. Valora su experiencia profesional
La experiencia de un abogado podríamos decir que es el pilar fundamental de su trabajo y, por lo tanto, un factor muy a tener en cuenta. Al igual que no elegiríamos a un cirujano recién graduado para operarnos, tampoco deberíamos elegir a un abogado sin experiencia para tratar nuestro caso.
Un abogado con experiencia en la materia que nos afecta será el profesional más adecuado para cuidar de nuestros intereses, defendernos ante terceros y darnos asesoramiento. Además, también tendrá mucha más soltura para desenvolverse en negociaciones y en juicios.
6. Ten en cuenta la calidad humana y el trato
El abogado que elijamos será la persona que nos acompañe durante todo el proceso judicial. Por eso, el trato cercano, la amabilidad y la calidad humana tienen un papel fundamental a la hora de elegir al mejor profesional.
Además, el abogado que contratemos debe ofrecernos plena confianza y la seguridad de que entiende nuestros intereses y es capaz de defenderlos. De esta forma, nos sentiremos más cómodos durante un proceso y tendremos más garantías de éxito.
7. Echa un vistazo a sus referencias
Por último, antes de contratar a un abogado, debemos echar un vistazo a sus reseñas para saber qué opinan o cómo se han sentido otros clientes que han puesto su caso en sus manos. Del mismo modo, será interesante buscar información sobre casos de éxito de este profesional.