Demasiados focos de incertidumbre como para comprar acciones

Comenzábamos la jornada con una preapertura muy tranquila en las bolsas europeas, tras el cierre por festivo ayer de Wall Street, y unos futuros del mercado de valores americano descontando ligeras pérdidas. Las bolsas asiáticas cerraban prácticamente planas, con un escenario más cauteloso para los activos de riesgo.

Las bolsas europeas abrían con moderados descensos y un bajo volumen de negociación. El Eurostoxx 50 descendía un 0,15%, mientras que el Ibex 35 caía un 0,04%. Los analistas de Link señalaban tres factores que serán determinantes en la evolución de los mercados de valores en las próximas semanas:

• Guerra comercial EE.UU. y China.
• La “tragicomedia” del Brexit.
• Crisis política en Italia.

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Las primeras horas de contratación en Europa fueron bastante tranquilas. No había ninguna referencia macro de especial importancia, y los inversores preferían mantener sus posiciones tras las ventas iniciales. En el plano nacional, destacar la debilidad, un día más, del sector bancario español, que está sufriendo unos últimos meses devastadores para sus acciones. Como ejemplo, las acciones de CaixaBank han perdido un 50% de su valor en menos de un año.

“Todo el mundo está infraponderando los bancos en sus carteras, y precisamente por eso es porque creo que nos encontramos ante una oportunidad de inversión muy clara. Se ha descontado de sobra el peor de los escenarios en estos valores. Las rentabilidades por dividendo que tienen planeada para los próximos años es muy atractiva, y un entorno de bajo crecimiento y bajos tipos de interés no se mantendrá por siempre. De aquí a unos años vista, nos arrepentiremos de no tomar posiciones en estos valores a los precios actuales”, nos comentaba un importante gestor nacional que ha preferido que no le nombráramos públicamente.

A media sesión el Eurostoxx 50 perdía un 0,40%, mientras que el Ibex 35 descendía un 0,16%, con los bancos liderando los descensos (Santander –0,83%, Sabadell –1,29%, Bankia –1,04%, Bankinter –0,73%).

Los futuros de Wall Street cotizaban con descensos cercanos al punto porcentual en preapertura, con la incertidumbre por la guerra comercial EE.UU./China como principal factor bajista para los inversores, a pesar de que el principal negociador comercial de China intentaba tender puentes de entendimiento con su contraparte de EE.UU. Afirmando que “espero que ambas partes busquen un terreno común”.

A este respecto tenemos que señalar que son varios los informes que hemos leído de importantes bancos de inversión americanos a sus clientes institucionales, en los que les recomiendan empezar a tomar posiciones de riesgo ante un escenario de acuerdo comercial en los próximos meses. ¿La tesis? Pues que consideran que el presidente de los EE.UU. necesita dicho acuerdo para tener opciones a un segundo mandato. Las elecciones presidenciales serán a finales de 2020.

La renta variable estadounidense abría con sólidos descensos en línea con lo que apuntaban en preapertura. El Dow Jones caía un 0,78%, el S&P 500 –0,72%, el Nasdaq –0,75%

Poco después de la apertura se publicaba el PMI manufacturero de EE.UU. en agosto que, según apuntaban los rumores, se situaba en zona expansiva (por encima de los 50 puntos), superando las previsiones de mercado. Este buen dato no tuvo efecto en el mercado de acciones estadounidense, que mantuvo los descensos cercanos al punto porcentual en el Dow Jones, por la fuerte pérdida de Boeing, y cercano al medio punto en el caso del S&P 500 y del Nasdaq.

Poco después se publicaban los datos de ISM manufacturero de agosto en EE.UU. Que se situaban por debajo de las previsiones y terreno de contracción (49,1 frente 51,1 esperado y 51,2 anterior). El gasto de construcción en julio subía un 0,1% frente +0,3% esperado y –0,7% anterior. Malos datos que empañaban el PMI manufacturero que comentábamos anteriormente.

De ahí al final de la sesión las bolsas europeas las caídas se afianzaron, con descensos del Eurostoxx 50 por encima del medio punto porcentual. El Ibex 35 cae algo menos por el buen comportamiento de títulos como Telefónica o Iberdrola.

En resumen, una sesión bastante tranquila en las bolsas del viejo continente, con bajo volumen de negociación, y con la sensación entre los inversores de que se necesita algo más para que sigan subiendo. Ese algo más podría ser un acuerdo comercial entre EE.UU. Y China, pero no parece que esto se vaya a producir en el corto plazo.