El coronavirus provocará en 2020 la primera caída de la demanda global de petróleo desde 2009, según la AIE
Europa Press
La demanda mundial de petróleo registrará este año una caída de 90.000 barriles diarios, en lo que supondría el primer retroceso del consumo global de crudo desde la Gran Recesión en 2009, como consecuencia del impacto de la propagación de la epidemia de coronavirus, según ha advertido la Agencia Internacional de la Energía (AIE) en su último boletín mensual.
De este modo, la AIE prevé que la demanda mundial de petróleo caerá en 2020 en 90.000 barriles diarios, hasta 99,9 millones de barriles al día (mb/d), frente a su anterior pronóstico de un crecimiento de 825.000 barriles diarios.
"Si bien la situación sigue evolucionando, esperamos que la demanda global de petróleo caiga en 2020, el primer descenso anual en más de una década, como consecuencia de la mayor caída en China, que representó más el 80% del incremento global en 2019, y por los problemas en los viajes y el comercio", ha explicado la agencia adscrita a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).
La agencia ha establecido un escenario "pesimista", en el que asume que los países afectados se recuperarán lentamente y la epidemia se expande a Europa y Asia, con una caída de la demanda de petróleo en 2020 de 730.000 barriles diarios, hasta 99,26 mb/d.
Por contra, en el escenario más optimista de la AIE, en el que no se produce un impacto grave en Europa y Norteamérica de la crisis, la demanda global de crudo aumentaría en 480.000 barriles al día, hasta 100,48 mb/d en 2020.
Según las nuevas estimaciones de la AIE, en el escenario base Europa vería caer su demanda de crudo en 200.000 barriles diarios, mientras que en América bajaría en 90.000 barriles y en el total de la OCDE en unos 240.000 barriles diarios.
En el peor escenario previsto, la demanda de crudo en Europa disminuiría en 250.000 barriles cada día y en 340.000 en América, mientras que en la OCDE el descenso sería de 730.000 barriles diarios. Por contra, en el mejor escenario la demanda en Europa bajaría en 80.000 barriles, pero aumentaría en 140.000 en América y en 30.000 barriles en la OCDE.
"La perspectiva inmediata para el mercado del petróleo dependerá de la rapidez con la que los gobiernos avancen en la contención del brote de coronavirus y de qué impacto tiene la crisis en salud de la actividad económica global", ha señalado la agencia.