¿Qué pasó en los mercados en el precedente del Coronavirus? Veamos

Nicolás López de M&G Valores

CapitalBolsa
Capitalbolsa | 03 feb, 2020 11:51
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El SARS (Severe Acute respiratory Syndrome) apareció en la ciudad china de Cantón en noviembre de 2002, pero fue a partir de marzo de 2003 cuando aparecieron casos de contagio en otros países que pasó a un primer plano en los medios de comunicación. El 15 de marzo 2003 la OMS declaró la alerta mundial y la enfermedad entró en la fase más aguda de contagios y mortandad que duró dos meses.

A mediados de mayo la enfermedad empezó a declinar y para el verano había desaparecido casi completamente. Aunque existen bastantes dudas sobre la veracidad de los datos ofrecidos por China, se reconoce un total de unos 8.000 casos y 800 fallecidos, lo que resulta en una tasa de mortalidad del 10%. La inmensa mayoría de los casos se registraron en China y países limítrofes. Fuera de esa zona tan sólo Canadá, con 250 casos, registró un número de enfermos significativo.

El impacto en los mercados.

Se puede decir que, al menos en Europa y EEUU, su impacto fue nulo. Curiosamente la fecha del 15 de marzo de 2003 en que se declaró la alerta sanitaria mundial coincidió con el inicio de un movimiento alcista que se mantuvo durante los meses álgidos de la enfermedad. Al contrario que ahora, la bolsa venía de un entorno bajista con la economía sufriendo todavía las consecuencias del estallido de la burbuja de internet en el año 2000. Un factor clave que influyó en el comportamientyo de los mercados en esos meses fue la invasión de Iraq por EEUU. El 16 de marzo EEUU y sus aliados lanzaron un ultimátum a Iraq en la famosa cumbre de las Azores, y el día 20 de marzo se iniciaba la invasión. El avance imparable de las tropas norteamericanas contagió a los mercados en esas semanas. Por otra parte, los mercados estaban también centrados en los indicios de recuperación de la economía y coincidió que en esos meses empezó a confirmarse el inicio de un nuevo ciclo de crecimiento de la economía que se prolongaría hasta el año 2007.

Indices bursátiles en 2003-04: aparentemente ajenos al desarrollo de la enfermedad.

ISM Index (PMI) vs S&P 500 2000-2005: tras la recesión en 2001 (zona sombreada) la economía nortemaericana afrontaba una nueva desaceleración en el inicio de 2003 que mantenía a la bolsa débil. En ese momento los indicadores económicos y la Bolsa giraron al alza sin que la epidemia del SARS fuese un factor relevante para los mercados.

Del SARS al coronavirus 2019-nCoV. Estamos ante una enfermedad de características similares al SARS. Hasta el momento se han declarado 9709 casos y 213 fallecidos. La cifra de contagios ya casi iguala al total registrado por el SARS, aunque con una tasa de mortandad inferior. Parece por tanto que el actual virus tiene una capacidad de contagio mayor, aunque no es descartable que en 2003 las autoridades chinas ocultaran el alcance real de la epidemia. La declaración ayer por parte de la OMS de la emergencia sanitaria mundial nos situaría en marzo de 2003, entrando en la fase más aguda de la enfermedad. Es probable que en los próximos 2-3 meses convivamos con un continuo aumento de los contagios y su extensión a otras zonas del mundo, como sucedió entonces, antes de que la enfermedad empiece a remitir. La reacción de las autoridades chinas para limitar los contagios implica una severa limitación de los movimientos de las personas que tendrá un efecto significativo sobre la economía, aunque hay que suponer que limitado en el tiempo. Una caída de la actividad económica en estas circunstancias no tiene nada que ver con una recesión. Se trata de una pérdida de actividad artificial que se recuperará automáticamente el día en que se levanten las medidas restrictivas sin dejar mayor rastro en la economía. En consecuencia, no sería razonable esperar una debacle en los mercados por esta cuestión exclusivamente.

La importancia de China para los mercados. Una diferencia importante respecto a 2003 es la gran importancia que ha adquirido China para la economía global y la sensibilidad de los mercados a posibles problemas de su economía. Es un hecho que la desaceleración económica global de 2018-19 ha estado muy ligada al frenazo del comercio mundial por la guerra comercial entre China y EEUU, lo que explicaría que desde 2017 la evolución de la Bolsa europea haya estado más influenciada por la de China que por la de EEUU. Tanto la tendencia general como los giros intermedios más relevantes han ido de la mano en ambos mercados. También el más reciente, relacionado con las noticias sobre el coronavirus, que ha dejado al menos un techo intermedio en las Bolsas que sugiere cierta prudencia en el corto plazo. El hecho de que la Bolsa china se haya girado a la baja sin superar los máximos de abril es una señal añadida de peligro. Y falta por recoger la caída de esta semana que ha sido festiva en China …

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