Los bancos centrales tienen como objetivo la manipulación de los mercados para fingir que no pasa nada
Carlos Montero
Que los bancos centrales de todo el mundo están aplicando todas las herramientas de las que poseen, y casi de las que no poseen, para evitar que la enorme recesión mundial que ha provocado la crisis sanitaria no se convierta en una Depresión peor que la del 29, es algo por todos sabido. Pero las preguntas que debemos hacernos son, ¿qué subyace detrás de estas medidas sin precedentes¿ ¿tendrán éxito?
Contestando a la primera de ellas, la teoría detrás de deprimir artificial e indebidamente los tipos de interés, y de inyectar liquidez a los mercados, es que se estimula que la gente se endeude para consumir más, compre acciones y otros activos financieros de riesgo, e invierta de forma productiva. En otras palabras, como dice el economista Guillermo Barba, los bancos centrales tienen como objetivo la manipulación de los mercados para fingir que no pasa nada, y para eso, inyecta cantidades ilimitadas de dinero.Barba añade:
Pero crear dinero digital infinito no es lo mismo que crear riqueza infinita, pues para satisfacer gustos y necesidades, primero hay que producir los bienes a partir de recursos siempre escasos y finitos.
Por supuesto, puede ignorarse la realidad, pero no por ello va a desaparecer. ¿Cuál es esa realidad? Que el mal manejo económico de la crisis por Covid-19 ha provocado la mayor destrucción de riqueza a nivel global de toda la historia. Podemos actuar como si eso no hubiera ocurrido, pero la verdad nos dará un golpe en la nariz.
De manera que el optimismo infundado en que habrá una “recuperación en forma de V”, recibió un balde de agua fría.