La Bolsa está plagada de fallos en cadena sobre predicciones y demás fanfarrias
Gráfico excepcional el que sigue ¿Quién se atreve a predecir el comportamiento de los mercados? Las pifias han sido espectaculares. "Las previsiones mueren el mismo día que se publican”, dijo Pedro Solbes el día que adelantó la cifra de crecimiento y, efectivamente, la estimación tuvo poco recorrido.
No estaba solo. El FMI, la OCDE y otros supra organismos han fallado más que las escopetas de feria en múltiples ocasiones. El asunto tiene bemoles. En términos de Bolsa, los estrategas y visionarios dicen que les pagan para eso. No es cierto, tanto como los pronósticos que lanzan a los mercados desde tiempos inmemoriales. Los fallos en cadena se han multiplicado por los siglos de los siglos. Las predicciones van de la mano de las fanfarrias. Esas bandas de música formadas por instrumentos de metal, en ocasiones acompañados de percusión, que suelen (solían) tocar por las calles en las fiestas populares y en ocasiones ceremoniosas. Recuerden que "la música de la fanfarria anunciaba la llegada del presidente"
¿Quién se atreve a predecir?