La actividad comercial en España aumenta al ritmo más lento desde finales de 2013
PMI servicios España enero 52,3 frente 53,9 esperado y 54,9 anterior.
- Los nuevos pedidos aumentan a un ritmo más lento a medida que persisten las incertidumbres políticas.
- La confianza comercial se encuentra entre las más bajas en más de seis años.
- Los márgenes de beneficios permanecen bajo presión.
El sector servicios de España continuó expandiéndose al principio de 2020, pero al ritmo más débil de más de seis años, ya que las incertidumbres políticas afectaron la demanda y la confianza empresarial. No obstante, el nivel de empleo continuó aumentando, aunque a una tasa modesta, y los crecientes costes laborales impulsaron los gastos operativos, que aumentaron drásticamente durante el mes. Los márgenes de beneficios se mantuvieron bajo presión ya que los precios de venta se incrementaron solo levemente.
El Índice de Actividad Comercial, basado en una pregunta en la que se solicita a las empresas que comenten sobre la evolución de su actividad con respecto al mes anterior, se situó por encima del nivel de ausencia de cambios de 50.0 por septuagésimo quinto mes consecutivo en enero. Sin embargo, al disminuir del nivel 54.9 registrado en diciembre hasta 52.3, el ritmo de crecimiento señalado por el índice, aunque sólido, fue el más débil desde noviembre de 2013.
Los encuestados vincularon estrechamente la ralentización del crecimiento de la actividad comercial con el incremento igualmente más débil de los nuevos pedidos. Los últimos datos mostraron que las ventas aumentaron solo modestamente y al ritmo más lento desde septiembre de 2013. Las empresas encuestadas informaron ampliamente que las incertidumbres políticas afectaron la demanda interna, que según los informes se mantuvo moderada.
También se comentó que las persistentes incertidumbres internacionales relacionadas con el Brexit y las guerras comerciales mundiales tuvieron un impacto negativo en las ventas al exterior, que disminuyeron por noveno mes consecutivo al comienzo de 2020.
La inquietud sobre el entorno político actual en España también afectó negativamente la confianza de las empresas del sector servicios español. Aunque un saldo neto de empresas prevé un aumento de la actividad comercial en los próximos 12 meses, la confianza en el futuro cayó hasta un nivel igual que el más bajo observado en más de seis años (registrado en agosto de 2019). Algunas de las empresas encuestadas informaron que los planes de negocios se suspendieron hasta que se visualice una mayor claridad en lo que respecta al entorno político.
No obstante, las empresas continuaron aumentando sus niveles de personal en enero, aunque el crecimiento fue modesto y se mantuvo por debajo del promedio de la secuencia actual de expansión (que comenzó en octubre de 2014).
Cuando los niveles de personal aumentaron, el crecimiento fue principalmente el resultado de los esfuerzos para poner al día las cargas de trabajo en general en enero. Los pedidos pendientes de realización aumentaron por tercer mes consecutivo, y las empresas informaron que un incremento de los nuevos pedidos y la reactivación de proyectos previamente suspendidos aumentaron las cargas de trabajo.
El incremento de los costes laborales afectó a los gastos operativos de las empresas durante el último período de la encuesta, que de nuevo aumentaron drásticamente.
Los encuestados también mencionaron la subida de precio del combustible. Si bien las empresas buscaron transferir el aumento de los costes a sus clientes, la inflación de los precios de venta fue solo marginal en enero.
A juzgar por los últimos datos del índice PMI, el crecimiento del sector privado español se debilitó hasta su mínima de tres meses en enero. El Índice Compuesto de Actividad Total* disminuyó del nivel 52.7 registrado en diciembre del año pasado al 51.5 en enero.
El sector manufacturero siguió siendo la principal fuente de debilidad, y la producción continuó disminuyendo en este sector en enero. No obstante, el ritmo de declive fue el más débil en la secuencia actual de ocho meses de contracción. Aunque el crecimiento se mantuvo firme en el sector servicios, el ritmo de expansión fue el más lento desde noviembre de 2013.
Se observaron tendencias similares para los nuevos pedidos, ya que los nuevos pedidos recibidos por los fabricantes siguieron disminuyendo, aunque a un ritmo más lento. Los nuevos pedidos recibidos por el sector servicios aumentaron al ritmo más débil en casi seis años y medio. Los nuevos pedidos procedentes del extranjero continuaron contrayéndose en ambos sectores, extendiendo el período actual de declive a ocho meses.
En el frente laboral, los fabricantes continuaron reduciendo sus niveles de personal y al ritmo más acelerado en más de seis años. Ante las continuas presiones de la capacidad, las empresas de servicios aumentaron modestamente sus plantillas.
Los crecientes costes laborales impulsaron los costes operativos de las empresas de servicios en enero, pero la caída de los precios de los metales condujo a una disminución de los costes de los insumos de los fabricantes.
Por último, la confianza empresarial en su conjunto fue un poco más débil en enero, reflejando principalmente la inquietud con respecto al entorno político actual.