El Tesoro encara la recta final del año con un 95,2% captado de lo previsto para todo 2018
El Tesoro Público vuelve a los mercados con la primera de las tres subastas previstas para el mes de diciembre, las últimas del año, tras haber captado ya el 95,2% de lo previsto para todo el año 2018, otro buen ejercicio para la deuda pública española.
La del martes será la primera de las emisiones previstas para el mes de diciembre, de letras a 6 y 12 meses, a la que le sucederá otra el miércoles de bonos y obligaciones y una última el martes 11 de letras a 3 y 9 meses, ya que el Tesoro ha decidido no convocar la prevista para el día 13 de deuda a largo plazo por haberse cubierto ya los objetivos de financiación para todo el año.
En concreto, el organismo ha captado ya el 95,2% del total de programa de financiación previsto para este año, con un 97,5% colocado de lo previsto en deuda a medio y largo plazo, y un 91,5% del programa de letras.
En la subasta del martes el Tesoro ofrecerá a los inversores letras a 6 y 12 meses, con una referencia de un interés marginal del -0,411% y del -0,318%, respectivamente, de la última puja de este tipo realizada el pasado 13 de noviembre.
En esa subasta de referencia, el Tesoro captó 4.451 millones de euros, dentro del rango medio previsto, y contuvo los tipos negativos en ambas emisiones, aunque en el caso de las letras a seis meses la rentabilidad negativa fue menor.
Además, el organismo adscrito al Ministerio de Economía y Empresa colocará también el miércoles bonos y obligaciones del Estado: bonos a 3 años, con cupón del 0,05%, bonos a 5 años, con cupón del 0,35%, y obligaciones a 10 años, con cupón del 1,40%.
Para determinar la evolución del coste de financiación, la referencia en los bonos a 5 años es el tipo de interés marginal del 0,574% de la subasta del 8 de noviembre; del mismo día es el tipo del 0,111% de referencia en los bonos a 3 años, mientras que en las obligaciones a 10 años es el tipo del 1,624% de la subasta del 22 de noviembre.
EMISIÓN NETA DE 35.000 MILLONES EN EL AÑO
A falta de las tres últimas subastas del año, la emisión bruta asciende ya a 203.448 millones, lo que supone el 95,2% de lo previsto para todo el ejercicio. De estos, 128.231 millones forman parte del programa de financiación a medio y largo plazo, cifra que representa un 97,5% de la previsión de emisión a medio y largo plazo para este año, y los 75.217 millones restantes corresponden a letras, el 91,5% de lo previsto para 2018 en esta modalidad.
Los resultados de las últimas subastas demuestran que los inversores siguen confiando en los títulos de deuda española, después de que los mercados hayan sorteado a lo largo del ejercicio distintos episodios de incertidumbre, como la moción de censura a Mariano Rajoy, el Brexit o más recientemente el desafío fiscal en Italia.
El organismo prevé cerrar el año con una emisión neta de 35.000 millones de euros, 5.000 millones menos respecto a los 40.000 millones previstos y 10.000 millones de euros por debajo respecto a los 45.031 millones de cierre del año pasado, por los mayores ingresos tributarios y las menores necesidades de financiación, y prevé un ahorro de 1.500 millones de euros en carga financiera, según detalló el director general del Tesoro, Carlos San Basilio, esta semana.
En total, el Tesoro estima que cerrará el año con una emisión bruta de 213.687 millones de euros, un 3% menos que los 220.145 millones de euros previstos y un 8,6% por debajo de los 233.900 millones de euros de 2017, pese a que este año se han realizado tres amortizaciones anticipadas del préstamos del MEDE por valor conjunto de 8.000 millones de euros. De esta forma, el importe pendiente de devolución es de 23.721 millones de euros, del total de 41.333 millones de euros prestados por la UE.
En detalle, la emisión bruta de deuda a medio y largo plazo será de 131.485 millones, un 4% más que lo previsto, y la emisión neta de 42.175 millones, un 6,3% menos que lo estimado. En cuanto a las Letras, el Tesoro cifra en 82.202 millones la emisión bruta de este año, un 14,5% menos de lo recogido en la estrategia, y una emisión neta negativa de 7.175 millones, un 43,5% mayor de lo esperado.
EP