“Las perspectivas de una victoria de Trump en las elecciones americanas están debilitando al dólar”
Ebury
La evolución del mercado de divisas en las últimas dos semanas presenta dos divisas importantes que llaman la atención, una es el dólar norteamericano y la otra es la libra esterlina.
El dólar norteamericano está reaccionando finalmente a las noticias políticas que llegan de Estados Unidos. Se ha producido un cambio importante porque siempre se había asumido que la victoria de Trump sería positiva para el dólar. Una política de aranceles fuertes como la que impulsa Donald Trump, según la teoría económica, tiende a ser positiva para la moneda.
Sin embargo, la elección de J.D. Vance como candidato vicepresidencial sugiere una la devaluación del dólar, debido a la política mercantilista de expansión de las exportaciones y de apoyo al sector manufacturero a través de una devaluación de la divisa, que podría ser uno de los ejes fundamentales de la administración Trump.
Con lo cual, las perspectivas de una victoria de Trump, que han aumentado según los mercados hasta un 70%, están resultando no en un fortalecimiento del dólar, sino en su debilitamiento. Será un detalle muy importante a seguir en las próximas semanas a medida que nos acercamos a las elecciones de noviembre.
“Los mercados están impulsando la libra hacia una posición un poco más equilibrada frente a las divisas europeas”
La libra, por su parte, de una manera un poco sorprendente, es la divisa del G10 que mejor comportamiento presenta en lo que va de año. La victoria de un Laborismo moderado en las elecciones generales ha reforzado esa tendencia al alza. Y quizás esta fortaleza relativa de la libra se debe primero a la debilidad extrema que había mostrado en los años anteriores a 2024, cuando había desarrollado una prima de riesgo importante por el miedo tanto al conflicto con la Unión Europea, su principal socio comercial, como a las ocurrencias de política fiscal, como las que dieron al traste con el Gobierno de Liz Truss.
La victoria aplastante de Laborismo en las elecciones ha tranquilizado a los mercados en ambos frentes. Se espera una política más conciliadora con la Unión Europea. Y se espera, cuando menos, ninguna originalidad en política fiscal por parte del gobierno laborista, con lo cual se está reduciendo mucho esta prima de riesgo y los mercados están impulsando una libra muy barata hacia una posición un poco más equilibrada frente a las divisas europeas.