Trump baja el pulgar a Taiwán y provoca el pánico vendedor entre los inversores
Los traders e inversores no son conocidos por ser tímidos. Con una fortaleza mental y emocional natural, pocas cosas pueden realmente perturbarlos. Sin embargo, los comentarios del expresidente Donald Trump han sacudido su confianza.
Las acciones de algunos de los mayores fabricantes de chips del mundo han caído tras la declaración de Trump de que Taiwán, un actor clave en la industria mundial, debería pagar su propia defensa contra China. Además, la administración Biden ha prometido imponer restricciones más estrictas a las exportaciones de chips estadounidenses a China.
Nvidia experimentó la mayor caída , con una capitalización de mercado que cayó más de 200 mil millones de dólares, o un 6,7%. Taiwan Semiconductor Manufacturing Co., el mayor fabricante de chips por contrato del mundo, vio caer sus acciones un 8%. Incluso fuera del sector de los chips, las empresas del club de los Siete Magníficos se vieron afectadas, con las acciones de Meta cayendo un 5,7%.
Las acciones de los Siete Magníficos perdieron en conjunto cerca de 500 mil millones de dólares en valor ayer. El miércoles pasado, este selecto grupo sufrió otro golpe importante, perdiendo más de 600 mil millones de dólares en valoración total.
Más allá de la industria de los chips, Nvidia se ha visto atrapada en una ola de ventas más amplia que afectó al sector tecnológico de gran capitalización. La ola de ventas en Nvidia eliminó más de 200 mil millones de dólares de su capitalización de mercado , lo que pone de relieve la extrema volatilidad de esta importante empresa pública. Recientemente, a fines de junio, Nvidia sacudió los mercados cuando perdió más de 500 mil millones de dólares en un período de tres días.
Los inversores están preocupados por la posibilidad de que se impongan más restricciones comerciales a la industria estadounidense de chips. Las declaraciones de Trump son especialmente alarmantes, ya que podrían perturbar la relación diplomática de larga data entre Estados Unidos y Taiwán . Esta postura podría tener importantes implicaciones para el dominio de Taiwán en la fabricación de chips semiconductores si surge un conflicto entre Taiwán y China, lo que podría causar una interrupción catastrófica en la cadena de suministro mundial de chips y afectar gravemente a la economía estadounidense.