Las acciones nunca han estado tan caras según esta métrica como ahora
Según métricas de valoración como la comparación del nivel del S&P 500 con las ganancias previstas de sus empresas miembro, el mercado estadounidense parece notoriamente caro en este momento, han dicho los observadores del mercado.
El S&P 500 actualmente cuenta con una relación precio-beneficio a futuro de 21,4 veces las ganancias esperadas para 2025. Esta cifra ha bajado ligeramente desde su pico reciente a fines del año pasado, pero se mantiene cerca de los niveles más altos desde la primavera de 2021, según muestran los datos de FactSet.
En relación con sus ventas esperadas, el índice no ha estado tan caro desde poco después de que estallara la burbuja puntocom.
Ambos indicadores son algo esotéricos. Para muchos inversores, una métrica más relevante podría medir cuán caras son las acciones estadounidenses en relación con la capacidad de los consumidores para comprarlas.
Un equipo de estrategas de Leuthold Group actualizó recientemente un indicador que pretende mostrar exactamente eso.
El histograma que figura a continuación muestra el precio de una “unidad” del S&P 500 en relación con el salario medio por hora de los trabajadores estadounidenses del sector manufacturero. Los datos se presentan trimestralmente desde 1947.
Como muestra el gráfico, a fines del año pasado, los trabajadores habrían tenido que trabajar más de 200 horas al salario manufacturero promedio para poder comprar una unidad del S&P 500. Se trata de la cifra más alta registrada y muy por encima de la mediana de 33.
Las acciones estadounidenses se han disparado en los últimos dos años. El S&P 500 se ha revalorizado más del 50% desde su mínimo de mercado bajista alcanzado el 12 de octubre de 2022, según muestran los datos de FactSet.
Sin embargo, las acciones han atravesado una mala racha últimamente. El S&P 500 no ha registrado un nuevo récord de cierre desde el 6 de diciembre.
Después de un comienzo difícil para 2025, las acciones volvieron a estar en modo repunte el miércoles después de que la última lectura sobre la inflación básica de precios al consumidor mostró que fue más suave el mes pasado de lo que los economistas esperaban.