Esta es la "salsa secreta" para que las bolsas eviten una brusca caída en 2025
Los inversores deberían prepararse para otro gran movimiento el próximo año, según un análisis de datos históricos del Bank of America.
El estratega Michael Hartnett dijo en una nota que el índice S&P 500 solo ha registrado ganancias anuales consecutivas de más del 20% cuatro veces en su historia. Lo que sucedió después de esos movimientos anteriores no siempre fue positivo.
Hartnett afirmó que, tras haber subido un 31% y un 38% en 1927 y 1928, respectivamente, el S&P 500 perdió un 12% en 1929 y otro 28% en 1930. Tras unas ganancias del 48% en 1935 y del 28% en 1936, el índice de referencia perdió un 39% en 1937, aunque repuntó un 25% en 1938.
El índice de referencia también tuvo una leve ganancia del 3% en 1956 y perdió el 14% en 1957 después de subir un 45% y un 26% en 1954 y 1955, respectivamente. La última vez que el S&P 500 registró ganancias anuales consecutivas del 20% fue en la década de 1990, cuando subió un 34% en 1995 y un 20% en 1996. Esas ganancias fueron seguidas por repuntes del 31% en 1997 y del 27% en 1998.
Hartnett señaló que la “salsa secreta” para que el S&P 500 evite algunas de las bruscas reversiones observadas anteriormente es una caída en los rendimientos de los bonos del Tesoro. Esto puede “catalizar nuevas ganancias importantes de las acciones, como ocurrió en 1997/98”.
El problema ahora es que los rendimientos han ido aumentando en los últimos meses, impulsados por nuevos datos que muestran una economía estadounidense resiliente. Además, muchos inversores temen que el presidente electo entrante, Donald Trump, siga adelante con políticas comerciales proteccionistas, que podrían impulsar la inflación.