"El riesgo en las Bolsas es ahora a la baja"
Link Securities
Tras su peor primer trimestre de la historia, las bolsas europeas y estadounidenses iniciaron el 2T2020 con un tono muy negativo, con sus principales índices terminando la jornada con fuertes descensos. Las últimas noticias sobre la propagación del coronavirus de origen chino a nivel mundial hacen presagiar que las medidas excepcionales adoptadas por muchos gobiernos, que han llegado incluso a paralizar casi por completo la actividad productiva en países como Italia y España, van a estar vigentes más tiempo de lo inicialmente previsto, por lo que el daño potencial a las economías va a ser mayor de lo anticipado, algo que pone en duda la capacidad de las mismas para recuperarse rápidamente.
Así, todo hace presagiar que las dos próximas semanas son claves para conocer la evolución de la epidemia en países como Italia, España o EEUU donde, a pesar de algunos indicios positivos puntuales, no se ha alcanzado el tan esperado pico en el número de infectados. Es más, HOY The Wall Street Journal pone en entredicho las cifras oficiales de muertos en Italia como consecuencia del virus. Además, la Inteligencia estadounidense ha elaborado un informe en el que muestra gran escepticismo con relación a las estadísticas oficiales chinas sobre el impacto del virus, como también lo muestra sobre las de Rusia, Indonesia e Irán.
Independientemente de la veracidad de las cifras chinas, que ya venían siendo puestas en entredicho desde hace tiempo, incluso desde el propio país, la realidad es que la propagación del virus sigue avanzando a un ritmo elevado, siendo muy factible que a comienzos de la semana que viene se alcance el millón de infectados “oficiales” y los 50.000 muertos.
Ante este escenario, los inversores parece que han vuelto a optar por huir de sus posiciones de mayor riesgo, lo que incluye no solo acciones sino también bonos de los países considerados menos solventes -AYER los bonos soberanos de los países de la periferia del euro fueron castigados, lo que impulsó al alza sus rentabilidades y las primas de riesgo de estos países-, volviéndose a refugiar en activos de corte más defensivos como los bonos del Tesoro estadounidenses -la rentabilidad del 10 años se volvió a acercar a sus mínimos históricos, alcanzados hace unas semanas-, o en divisas como el dólar estadounidense, el franco suizo o el yen japonés.
Además, poco a poco se están publicando indicadores adelantados de actividad y confianza empresarial y de los consumidores, así como cifras macroeconómicas, que comienzan todos ellos a mostrar el impacto negativo que en la economía de los distintos países está teniendo ya la crisis sanitaria. AYER, por ejemplo, se dieron a conocer los PMI manufactureros de marzo en las principales economías desarrolladas, índices que ya apuntan a un fuerte deterioro futuro de la actividad en el sector, algo que será más evidente en sus lecturas de abril.
Mientras tanto, en Europa continúa el “juego político”, con los ministros de Economía de los países de la Unión Europea (UE) discutiendo una respuesta conjunta a la crisis sanitaria, algo que, dadas las diferencias entre las partes, vemos complicado que se logre acordar en el corto plazo. Así, el gobierno de Francia está intentando impulsar la creación de un fondo de rescate paneuropeo, mientras que otros gobiernos como el español y el italiano intentan, sin mucho éxito, impulsar la emisión de deuda solidaria europea, los conocidos como coronabonos. Independientemente de si se llega o no a un acuerdo, lo que vuelve a ser evidente es la falta de capacidad de reacción de la región si se compara con la agilidad con la que los EEUU suelen afrontar este tipo de crisis. Ya se demostró en la crisis financiera y parece que se va a volver a comprobar en la actual crisis sanitaria.
Centrándonos en la sesión de HOY, señalar que esperamos que las bolsas europeas abran entre planas y ligeramente a la baja. Seguimos pensando que el riesgo en estos momentos es a la baja, con cada vez más empresas revisando sus expectativas de resultados y anunciando que retiran sus planes de remuneración a sus accionistas, bien cancelando totalmente el dividendo a cargo de 2019 y 2020, bien cancelando sus planes de recompra de acciones. En ese sentido, cabe señalar que el Banco de Inglaterra (BoE), en línea con lo hecho por el BCE, ha “obligado” a las entidades de crédito británicas a cancelar el pago de dividendos, algo que AYER pesó mucho en el comportamiento de sus acciones en bolsa. Además, y como venimos señalando desde hace tiempo, el flujo de noticias tanto económicas como las relacionadas con la propagación del Covid-19 va a seguir siendo muy negativo, lo que debe pesar en el ánimo de los inversores. HOY, por ejemplo, esperamos con cierta inquietud la publicación en EEUU de las cifras de peticiones iniciales de subsidios de desempleo semanales, cifra equivalente al paro semanal, así como las cifras de desempleo españolas, correspondientes al mes de marzo. Los datos esperamos que sean muy negativos, lo que puede generar cierta tensión en los mercados.