El Fondo Soberano de Noruega está a punto de liquidar activos. Otra amenaza para los mercados
Capital Bolsa
El fondo de riqueza soberana más grande del mundo está a punto de comenzar a liquidar activos. Noruega se enfrenta a su peor choque económico en 50 años y necesita retirar cantidades récord de su fondo soberano de riqueza.
Tiene una posición en compañías cotizadas españolas por un valor de 117.220 millones de coronas (11.700 millones de euros). Su inversión en deuda pública emitida por el Tesoro asciende a 69.795 millones de coronas (6.900 millones de euros). El resto corresponde a algunas emisiones de bonos de empresas (Ibercaja Banco, Liberbank, Telefónica) y a varias compras de activos inmobiliarios no cotizados. El fondo Noruego controla un 3,4 % de las acciones de Iberdrola, un 5,1 % de Técnicas Reunidas, y un 2,6 % de Banco Santander y de BBVA.
El precio del barril del petróleo ha llegado a caer esta madrugada por debajo de los 20 dólares. Como en crisis anteriores, los expertos consultados advierten de la dependencia de grandes fondos soberanos del precio del petróleo, como elemento subyacente. Si el petróleo se hunde, los fondos soberanos deben vender acciones para mantenerse a flote ¿Sucederá? Nadie estamos a salvo de nada. En la actualidad existen 84 fondos soberanos activos en el mundo. 55 países han creado al menos un fondo soberano. Oriente Medio, China, el Sudeste Asiático y Noruega son los cuatro polos de mayor actividad de fondos soberanos. El volumen total que gestionan los fondos supera los 6 billones de dólares, lo que supone el 10 % del PIB mundial. El fenómeno de los fondos soberanos tiene una gran difusión desde hace varios años y su impacto en los mercados es cada vez más relevante, porque tan pronto compran acciones de Bolsa como Deuda Pública, inmuebles o metales. El fondo soberano noruego sigue a la cabeza de los fondos por volumen de activos gestionados. En septiembre superó los 1.000 millones de dólares. Los fondos soberanos se han convertido en los nuevos reyes del mundo. Luchan a brazo partido con los grandes fondos de inversión anglosajones para mantener este liderazgo. El mundo está cada vez más en manos de menos.