El deshielo de las OPV conlleva pros y contras para los inversores
Ben Laidler, estratega de mercados globales de eToro
RESURGIMIENTO: Las ofertas públicas de venta (OPV) están resurgiendo tímidamente tras dos años de baja actividad. El número de OPV estadounidenses ha aumentado un 10% este año, aunque el índice Renaissance IPO sigue teniendo dificultades.
Las OPV son una bendición con dos caras. Por un lado, ofrecen nuevas oportunidades de inversión, desde las recientes OPV de Reddit, Ibotta y Amer Sports y las escisiones de GE, hasta las próximas salidas a Bolsa de Viking Cruises, Puig Luxury y CVC Private Equity. Pero también empieza a socavar el déficit de oferta de valores que ha contribuido a sostener los mercados. La tendencia es cada vez más hacia emisiones de OPV globales, con free floats más pequeños, más estructuras de doble clase y menos beneficios.
DE-EQUITISATION: El número de valores cotizados lleva años reduciéndose, a pesar de que la capitalización media del mercado ha aumentado. Esto se debe a que el número de OPVs y escisiones es incapaz de seguir el ritmo de las recompras de acciones y las retiradas de la Bolsa, siendo estas últimas alimentadas por la actividad de fusiones y adquisiciones. Las empresas estadounidenses son las mayores compradoras de acciones, ya que adquieren entre 800.000 y 1 billón de dólares al año y reducen su capital flotante. En los últimos 25 años, el número total de acciones estadounidenses ha caído un 40%, y en el Reino Unido un 20% (véase el gráfico). Por su parte, las salidas a Bolsa en China se han multiplicado por cinco y han contribuido a la enorme brecha existente entre su pujante economía y su lánguido mercado bursátil.
OPVs: Muchas de las características de las OPVs siguen siendo las mismas. La empresa media que sale a Bolsa tiene nueve años, la mitad está respaldada por capital riesgo o privado y un tercio pertenece al sector tecnológico. Pero también hemos visto cuatro grandes cambios en Estados Unidos. 1) La proporción de OPVs que cotizan con una doble clase de acciones se ha triplicado hasta el 30%, frente a una media del 10% en 40 años. 2) La proporción de OPVs estadounidenses de empresas extranjeras se ha disparado hasta superar el 40% del total de salidas a Bolsa el año pasado, la mitad de ellas procedentes de China, frente a una media del 12%. 3) Las salidas a Bolsa se han reducido a la mitad, hasta el 15%, frente al 29% de media. 4) El 65% de las OPVs de la última década han tenido beneficios negativos, frente a una media a largo plazo del 42%.