El gráfico semanal: FedEx anticipa la desaceleración global
Renta 4 Banco
La semana pasada veíamos cómo el petróleo ha experimentado un recorte significativo desde los máximos de 130 dólares/barril (en el crudo ligero WTI) hasta los actuales niveles del entorno de 85 dólares. Una caída que, al igual que la curva invertida en el mercado de bonos, refleja la creciente sensación de que se acerca una desaceleración económica global.
Esa caída del precio del petróleo se enmarca en una caída generalizada de las materias primas, que ha llevado al índice Bloomberg Commodity a recortar casi un 20% desde máximos. Pero no solo las materias primas han caído, también de forma paralela han caído los fletes marítimos, muy afectados por la debilidad del comercio mundial, en parte provocada por China. El índice Shifex, uno de los más representativos en el tráfico de contenedores, ya que incluye las tarifas entre Shanghái (China) y Los Ángeles (EE.UU.), registra ya caídas superiores al 60% respecto de máximos.
La parte positiva de esas caídas de precios es que los cuellos de botella que en el verano y otoño de 2021 afectaron tan negativamente a las cadenas de suministro globales ahora empiezan a solucionarse, pero la parte negativa es que, sin duda, generan sombras en el crecimiento económico futuro.
En la sesión de cierre semanal del viernes, el gigante global del transporte FedEx publicó unos resultados preliminares del último trimestre realmente decepcionantes, pero lo que más inquietó a los inversores es que el CEO de FedEx, Raj Subramaniam, dijo que la situación de FedEx no era sino un reflejo de la situación general de otros competidores y que el mundo se encamina claramente hacia una recesión global.
La cotización de FedEx cayó un 22% en la sesión del viernes arrastrando a las Bolsas americanas, que intentaban recuperarse del fuerte golpe que supuso, el martes, la publicación de la inflación agosto en EE.UU.
La cotización de FedEx, tal y como se ve en el Gráfico adjunto, está ya en el nivel que tenía a inicios de 2020, antes de la pandemia. Si pensamos que, en cierto modo, lo que están haciendo las Bolsas es corregir los excesos y las burbujas de valoración que la enorme liquidez inyectada tras la pandemia provocaron en el 2021, podríamos pensar que FedEx, tras el recorte del viernes, puede ser ya una opción atractiva de inversión, sobre todo si nos fijamos en los fundamentales, ya que su PER está en torno a doce veces beneficios.
FedEx puede ser, a nuestro juicio, un anticipo de lo que nos depara la temporada de publicación de resultados del tercer trimestre que comienza en octubre. Es decir, FedEx puede estar anticipando no solo la desaceleración global, sino también, en lo que a las Bolsas se refiere, posibles recortes que lleven las cotizaciones a precios muy atractivos para invertir. Muy atractivos, sobre todo, si pensamos que la economía va a entrar en una recesión a corto plazo, pero que a medio plazo superará esa contracción una vez se corrijan los excesos y los desajustes.