El gráfico semanal: El 'easy money' y sus curiosos efectos
Renta 4 Banco
Nos preguntábamos el lunes pasado si las Bolsas de la vieja Europa iban a ser capaces, tras las fuertes subidas de algunos valores europeos como Siemens Energy, de mantener el pulso a las hasta ahora vibrantes Bolsas norteamericanas, y la respuesta a esa pregunta debe ser, al menos en lo que a esta última semana se refiere, negativa.
El Eurostoxx ha bajado un 0,4% en la semana mientras que el S&P ha subido un 1,5% y el Nasdaq un 2,1%, en una semana en la que los valores tecnológicos han vuelto a brillar, movidos esta vez por las expectativas de que la Fed pueda bajar tipos a mayor velocidad de la esperada dado el buen dato de inflación de abril en EE. UU.
En lo que respecta a los dos valores que comparábamos el pasado lunes, han quedado casi en tablas, ya que la europea Siemens Energy ha subido un 3,3% en la semana mientras que la norteamericana Nvidia ha subido un 2,89%.
Pero quizás el dato más sorprendente de la semana ha sido la vuelta de los "meme stocks", en concreto de GameStop. El pasado lunes reaparecía en las redes sociales "Roaring Kitty", el trader que en 2021 lideró el movimiento de las "meme stocks", provocando fortísimas subidas de la cotización de empresas cuyo valor era más que discutible, pero que, en la particular narrativa de "Roaring Kitty", debían ser defendidos frente a Wall Street.
GameStop llegó a subir el lunes más de un 100% pero, en esta ocasión, la fiebre especulativa ha durado poco y el miércoles, jueves y viernes el valor se desplomó hasta cerrar el viernes con una caída semanal cercana al 15%. Es difícil no asociar esos movimientos tan extremos de la existencia de una excesiva liquidez en el sistema, una liquidez derivada de casi dos décadas de dinero abundante y barato (easy money).
Y es precisamente ese modelo de dinero barato, y las consecuencias últimas que prevén los inversores como consecuencia de esa abundancia de dinero barato, el que está impulsando a nuevos máximos al oro y a otros metales preciosos.
Aunque la plata se ha visto siempre postergada entre los inversores por el mayor "brillo" del oro, la realidad es que en lo que va de año la plata sube un 27,1% frente a un alza del 16,5% de subida para el oro. El viernes pasado la plata subió un 8,3% y es curioso que lo hiciese el mismo día que GameStop caía casi un 20% en la sesión.
En cierto modo, GameStop y la plata son dos caras de una misma moneda, la enorme liquidez del sistema. Esa liquidez provoca los excesos especulativos de GameStop pero a la vez conduce a los inversores más cautos a protegerse frente a posibles megainyecciones de liquidez por parte de los Bancos Centrales y a tratar de buscar alternativas a la pérdida constante de valor de las divisas oficiales, como el dólar, el euro, el yen, el yuan, la libra o, en general, todas las monedas oficiales. Y una alternativa, además del oro, es la plata.
Apostaríamos por una revalorización mayor en el medio plazo tanto para la plata como para el oro y desde luego desaconsejamos dejarse seducir por los cantos de sirena de las "meme stocks".