Iberdrola avanza las futuras líneas estratégicas

En concreto las medidas a adoptar son: 1) Recorte de gastos y de deuda en un 20%, 2) Mantenimiento del dividendo, 3) Recorte de plantilla de unos 400 empleados (ya anunciado tras los resultados trimestrales) y 4) Continuación del proceso de desinversión de activos entre los que figuran varios parques eólicos y activos de gas natural considerados no estratégicos.
Nuestro análisis: Estas declaraciones se hacen por su presidente con anterioridad a conocer la reforma eléctrica por lo que suponemos que en función de la misma la medidas podrían sufrir alguna modificación. En un entorno de posible recorte de beneficios nacionales, vemos razonable que la compañía pretenda un recorte de gastos (que no descartamos se traslade a una menor inversión nacional).
Conclusión: El sector eléctrico nacional continúa afectado por un serio riesgo regulatorio hasta conocer las medidas necesarias para eliminar la aparición de futuros déficits de tarifa. En este entorno presencia internacional y cómoda estructura financiera (amplia liquidez y ausencia de vencimientos en el c/p) son aspectos a valorar puesto que favorecerán a las compañías en casos de recorte de beneficios en la actividad nacional. Iberdrola reúne ambos aspectos.
En estos momentos nuestras preferencias en el sector se inclinan hacia las compañías de transporte energético, siendo Enagás la preferida por la combinación de ausencia de riesgo regulatorio, saneados crecimientos operativos, dividendo en crecimiento y atractiva valoración en bolsa. En este sentido aprovecharíamos la caída de cotización de ayer derivada de la colocación del 5% para apostar más por el valor como una clara oportunidad de inversión.