Bankinter: "En caso de duda, rebote"
La recuperación desde la victoria de Trump permite pensar que, excepto Italia o Portugal, las demás bolsas europeas podrían terminar arrojando saldos anuales positivos. Lo lógico sería que esta inercia reconstructiva se materializase en un “maquillaje de fin de año” conveniente para todo el mundo. La noche asiática se ha complicado un poco porque China ha capturado un dron submarino americano. Aumenta la tensión diplomática y debilita el USD. Este fin de semana desde 1,0425 hasta 1,0480, aunque esta mañana ha recuperado hasta 1,0467. Esto puede complicar un poco el arranque de la semana. Nada más.
Elevando la perspectiva identificamos 4 factores que seguirán empujando las bolsas, aunque a principios de 2017 podría notarse un cierto parón tras el rally de fin de año. Como primer factor, la revisión a mejor del contexto macro. El revulsivo positivo fue la victoria de Trump: más PIB y empleo, aunque también algo más de inflación. La ganancia de tracción de las economías desarrolladas empieza a ayudar a las emergentes, sobre todo a las productoras de materias primas. Es decir, a Latam antes que a Asia.
En segundo lugar, la mejora de los beneficios empresariales en 2017. Pasamos de unos BPAs en contracción o estancados en 2016 a otros en 2017 creciendo a doble dígito bajo. Como referencia, el BPA estimado para el S&P 500 pasa de +0,8% en 2016 a +11,9% en 2017, de -8% a +10,4% en el caso del EuroStoxx-50 y de -12,2% a +20,8% en el caso del Ibex. El cambio de signo respaldará las bolsas.
Como tercer factor, la política. O, más bien, la irrelevancia de la política. Este es uno de los mejores cambios que podría producirse: la pérdida de influencia de la política sobre el mercado. Los desenlaces adversos ya no impactan tan negativamente como antes.
En cuarto y último lugar, la presión del flujo de fondos. Tanto el generado forzadamente por los bancos centrales, como el espontáneamente generado por la mejora del ciclo económico. Y las alternativas de inversión con rentabilidades decentes sin riesgos indecentes son escasas. Tan escasas que el dinero presiona bolsas e inmobiliario en cuanto desaparecen los eventos adversos.
Todo esto resulta en una mayor tolerancia al riesgo, introduciendo una inercia alcista en las bolsas que no se agotará en el corto plazo. Puede que pierda vigor a principios de 2017 por razones técnicas, pero nada más. Volvemos a subir exposición: +5% Defensivos, Conservadores y Moderados (hasta 20%, 30% y 50% respectivamente) y +10% Dinámicos y Agresivos (hasta 70% y 85% ídem). La última entrada de flujos del año ayudará a que el rebote continúe. En el peor de los casos consolidarán niveles, pero los retrocesos son improbables. Y, si se produjeran, los interpretaríamos como una oportunidad.
Esta semana la macro ayudará algo. El IFO probablemente sea bueno hoy (110,6 vs 110,4 anterior), como el ZEW de la semana pasada. Mañana el BoJ no aportará nada nuevo. Pero el jueves 2 de los 3 indicadores americanos deberían tener impacto positivo. Los Duraderos podrían entrar en negativo tras el fuerte repunte de octubre (-4,7% vs +4,6% anterior). Pero el PIB 3T americano podría revisarse hasta +3,3% desde +3,2% y el Indicador Adelantado salir +0,2% vs +0,1% anterior. En caso de duda, la macro ayudará y las bolsas rebotarán porque ahora lo tienen todo a su favor. Sopla viento de cola, incluso si China captura un dron submarino americano.
Bankinter