A menudo oímos hablar de empleos que nos resultan completamente desconocidos o de los que no sabemos gran cosa, y el trabajo de representante de ventas, suele ser uno de ellos.
Un representante de ventas, es una persona que, dentro de una empresa, se encarga de vender bienes o servicios a los clientes, en representación de los fabricantes, mayoristas o simplemente proveedores de los servicios en cuestión. Para poder llevar esto a cabo, debe conocer muy bien el sector en el que se mueve, así como el producto o servicio que le interesa comercializar.
De esta manera, suelen especializarse en un producto o servicio, como pueden ser:
- Venta al por mayor o al consumidor. Por ejemplo, artículos para el hogar.
- Venta de productos especializados. Por ejemplo, equipo de ingeniería.
- Ventas de servicios. Por ejemplo, recursos de formación.
El trabajo de un representante de ventas, consiste en identificar a potenciales clientes, cerrar reuniones con ellos y finalmente venderles el producto o servicio en cuestión.
Aquellas empresas que tengan a un buen profesional en su equipo comercial, conseguirán aumentar sus ventas, y de esta forma poder garantizarse el bienestar del negocio. Esto significa que, actualmente, ser representante de ventas es una parte importante y uno de los perfiles más demandados en España.
20 consejos al empezar en un nuevo trabajo
Otras funciones que tiene este perfil:
- Identificar a clientes potenciales que puedan estar interesados en el producto que quiere comercializar. Lo hacen consultando directorios, pidiendo referencias a otros profesionales, asistiendo a distintos eventos…
- Contactar a los clientes para visitarlos y mostrarles el producto, intentando cerrar una venta.
- Mantener relación con los clientes existentes para continuar vendiéndoles productos en un futuro.
- Realizar demostraciones del producto que quieren vender, y repartir muestras o catálogos.
- Identificar las necesidades de sus clientes y demostrarles cómo puede ayudarles el producto que está vendiendo.
- Negociar precios, créditos, contratos… y preparar los acuerdos de los pedidos recibidos.
- Preparar la entrega o instalación de los bienes o servicios que hayan vendido.
- Atender y ayudar a resolver cualquier tipo de problema que pudiera surgir con el producto.
- Estar siempre al corriente de novedades en el sector, avances o actividades de los competidores.
Este trabajo resulta ser mucho más interesante y amplio de lo que podemos llegar a pensar en un primer momento. No obstante, para ser un buen profesional en este campo, son necesarias una serie de cualidades específicas:
- Ser un buen negociador.
- Organizado y ambicioso.
- Capaz de trabajar bajo presión.
- Capaz de llevar un registro y hacer papeleo.
- Capaz de cumplir con los objetivos de ventas.
Para finalizar, ha de entrenar ciertas habilidades a nivel profesional. Algunas de las más importantes, son:
- Capacidad de comunicación.
- Permiso de conducir.
- Conocimientos del sector y del producto.
- Habilidades numéricas y de informática básicas.
En definitiva, esta sería una forma general de describir que hace un representante de ventas, quien es, y en qué consiste su trabajo. Aunque su labor sea poco conocida o poco valorada, tiene una importancia muy grande en el desarrollo de una empresa, ya que, en cierta medida, de esta persona depende la prosperidad que pueda llegar a adquirir el negocio.
Google+