La venta ambulante es la que se desarrolla fuera de un establecimiento comercial permanente , mediante instalaciones desmontables, incluida la venta realizada en camiones. Se divide en:
- La efectuada en mercadillos de manera periódica u ocasional, en puesto o instalaciones desmontables, móviles o semimóviles.
- La desarrollada, expcepcional y puntualmente en recintos o espacios reservados para la celebración de fiestas populares.
- La realizada en enclaves aislados de la vía pública, en puestos de carácter ocasional autorizados únicamente durante la temporada propia del producto comercializado.
Según datos de El Economista existen entre 3.500 y 5.000 mercadillos en España, y dan empleo a 50.000 personas de forma directa y a 60.000 de forma indirecta. Sobretodo durante los últimos años la venta ambulante y el empleo en mercadillos ha sido una de las salidas para los muchos desempleados de nuestro país o para los que quieren un sueldo extra. Los mercadillos ambulantes tienen una larga tradición, sobretodo en los pueblos. Son una gran fuente de ingresos para los ayuntamientos y sobretodo para el comercio local por la afluencia de gente.
Los mercados ambulantes permiten dar salida a las producciones de los agricultores y los artesanos. Por otro lado, contribuyen a la estabilización de los precios, mejorando la oferta comercial en las zonas rurales y urbanas, incrementando las posibilidades de elección del consumidor y aumentando la competencia en el mercado minorista.
En los productos de alimentación, en vestido, calzado y productos para el hogar, los mercadillos tienen una especial relevancia y suponen un canal de distribución no convencional que completamente la oferta convencional. Para el desarrollo de estos mercados es esencial la labor de inspección y control de la calidad de los productos en las autoridades municipales.
Normalmente los mercadillos ambulantes han estado poco regulados por las autoridades, pero con el aumento durante los últimos años, en parte por la crisis, se han visto obligados a estipular una serie de trámites para tener un control sobre ellos. En primer lugar tendrán que darse de alta en la Seguridad Social, en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos y cotizar. También deberán de darse de alta en Hacienda y los Ayuntamientos deberán otorgar la licencia final.
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