España saldría del Euro para crear empleo

España saldría del euro en 2014 por la imposibilidad de crear empleo, y también lo haría Grecia, pero este mismo año, en 2013. Esto provocaría un desplome de los mercados durante aproximadamente nueve meses para después rebotar con fuerza, al igual que pasó en 2008 con la caída de Lehmann Brothers.

Al menos esto es lo que defiende Charles Robertson, de Renaissance Capital en su informe macroeconómico. En él, argumenta que el proceso será impredecible y rápido, al igual que sucedió en la época de la gran depresión, cuando países con tasas de paro similares a la que España tiene hoy en día abandonaron los tipos fijos del patrón oro para intentar superar la crisis. España necesita una devaluación mucho más fuerte de la que puede llevar a cabo estando en el euro para poder ser competitiva. La devaluación interna que se está efectuando hoy en día, la de intentar ser más baratos pero sin salir del euro, mediante ajustes como la bajada de los sueldos , puede ser demasiado larga y dolorosa de llevar a cabo. Además, el metodo de la devaluación monetaria, el que se llevaría a cabo si España dejase el euro, ya lo empleó España en los años 80 cuando el ejecutivo de Felipe González se vio obligado a devaluar la peseta para crear empleo. También cabe recordar que en aquel entonces el paro rondaba el 20%, y que hoy en día superamos el 25%.

El informe hace referencia a la importancia que tiene el conocer el “grado de dolor que puede aguantar la población”, diciendo que en el caso de seguir la senda actual, a la sociedad española le aguardan años de sufrimiento. El informe de Robertson se basa en las previsiones del Fondo Monetario Internacional, según las cuales el crecimiento máximo que puede esperar España en 2017 es de un 1,7%; demasiado bajo para crear empleo si tenemos en cuenta que en España nunca se ha creado empleo en situaciones en las que el crecimiento ha estado por debajo del 2,5%.

Por su parte, el paro se quedaría anclado en los niveles actuales: fluctuando en la horquilla 25-30%. Aunque el PIB creciese, la población no sentiría la mejora hasta pasado un tiempo, y esto haría que la gente tomara las calles para exigir el cambio.

Aparte de lo que diga el informe, parece que la situación se ha “estabilizado” algo, ya que el Gobierno de Rajoy no para de mandar mensajes positivos y esperanzadores a la población. Puede que todo esto se deba a la “calma” que reina en Europa estos últimos meses. Calma protagonizada por la ausencia de Angela Merkel, que está preparando su campaña electoral para enfrentarse a las elecciones federales el mes que viene. Veremos que sucede a partir del 22 de septiembre…