El presidente de la CEOE, Juan Rosell, ha puesto de manifiesto una de las grandes lacras de la economía española como es el impacto del absentismo laboral, que según los cálculos de la organización que dirige asciende a 1,4 millones de personas que no acuden a su puesto de trabajo cada día. Destacando, sobre todo, el absentismo laboral en las Administraciones Públicas, que asciende al 30%.
Ello supone cerca de un 1,5% del PIB, una cantidad inasumible para cualquier economía, especialmente en un momento de inicio de recuperación económica como el actual, ya que ahora, más que nunca, España necesita de la colaboración de todos los agentes socio-económicos involucrados en la producción económica.
No hace falta recordar que una persona que no acude a su puesto de trabajo, por una razón poco realista, es una pérdida que genera de manera directa a la empresa donde desempeña su labor profesional, y de manera indirecta a la economía en general, con lo que languidece la fuerza de la recuperación económica del país.
Rossell ha realizado estas declaraciones en una conferencia que ha impartido en la Universidad Menéndez Pelayo, en la que ha pasado por encima de los temas de mayor actualidad en el ámbito laboral, especialmente en la nueva vinculación de los salarios a la productividad, en lugar de a la inflación, lo cual generará una mayor sostenibilidad de las empresas.
El Presidente de la CEOE también destacó la rigidez del mercado laboral español, que retiene en exceso la contratación ante el temor de momentos posteriores de dificultades económicas en el ámbito empresarial, aunque no quiso entrar a valorar en profundidad el decreto del Gobierno sobre la negociación colectiva.
