En un escenario de destrucción generalizada de empleo preguntarse por los sectores o segmentos donde no se haya destruido si no se haya creado trabajo parece una utopía. Sin embargo, existen sectores y segmentos donde durante la crisis, el saldo final que arrojan los datos hoy en día, no ha destruido empleo sino que, efectivamente, lo ha creado.
Desafortunadamente, y como lector ya se imagina, no se trata de milagros. Son escasamente una veintena de sectores o segmentos dentro del centenar que se consignan en los datos del Instituto nacional de estadística, peor aún, dentro de esa veintena hay algunos sectores donde el movimiento de crecimiento no deja de ser testimonial, aun así, siempre es mejor crecer que decrecer.
151.000 empleo más en el tercer trimestre del año
El cómputo de la pérdida de puestos de trabajo desde el inicio de la crisis ya lo sabemos; es una factura de más de 3 millones de trabajadores. Algunos sectores se han visto especialmente dañados y abocados a la destrucción de empleo, la construcción residencial es sin duda uno de los más visibles y donde la pérdida supera el millón de puestos de trabajo perdidos. También otros sectores como la industria con cerca de 1 millón de puestos de trabajo destruidos ha contribuido a esas cifras millonarias de desempleo.
Aún así existen pequeños (o no tan pequeños) segmentos y sectores donde no sólo no se ha destruido sino que se ha creado mayor nivel de empleo. Fundamentalmente, atendiendo a los datos del INE, las actividades sanitarias obras que presentan un mejor comportamiento este nivel, habiendo creado durante el periodo de crisis algo más de 120,000 puestos de trabajo, por detrás, aunque ya cierta distancia, le sigue el segmento de las residencias con prácticamente 80,000 plazas creadas y el sector deportivo que ha generado más de 75,000 nuevos empleos.
Mención aparte debiéramos hacer a la administración pública. Probablemente si nos preguntáramos a nosotros mismos si manejar datos si la administración pública ha crecido o decrecido el número de empleo durante los años de la crisis la respuesta, habida cuenta de los procesos de recorte se inclinaría por la destrucción de empleo, sin embargo, no es así; hasta prácticamente 70,000 ocupaciones laborales ha aumentado la administración pública desde el inicio de la crisis.
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