Estar en el paro puede servir para pensar actividades o formas de trabajo que de otra manera jamás se hubieran ocurrido. Profesionales de carrera, o con expectativas a un título se encuentran en situación de no conseguir trabajos “convencionales” en blanco, fijos, full time, como siempre tuvieron o quisieran tener.
A pesar de todo, este momento puede ser bueno para encontrar alternativas: “como están todas las puertas cerradas, salir por la ventana”.
Se pueden realizar cursos cortos y buscar una salida inmediata, aunque sea momentáneamente, hasta que aparezca un trabajo como el deseado. En más de una oportunidad lo que comienza como un paliativo termina definiendo un rumbo completamente nuevo.
Hacer cursos, a su vez, sirve para tener una actividad y mantenerse activo durante el periodo del paro.
En principio aprovechar el momento para hacer aquello que siempre quiso y que nunca le dio el tiempo, aunque parezca ridículo y a destiempo: cockteleria, curso de Dj y mezcla, peluquería canina, cosmetología, pastelería, decoración de tortas, encuadernación, cocina étnica.
Otro consejo en tiempos de crisis es mirar alrededor, lo más cercano y detectar las necesidades cotidianas del entorno. Casos conocidos en tiempos de crisis:
– Cocina en casa para empleados de oficinas. Si hay empresas grandes cerca se pueden preparar menús del dia para viandas. Comidas especiales a pedido, cocina vegetariana o vegan.
– Confección de disfraces: para los actos escolares y los cumpleaños infantiles. Si se tiene hijos en edad escolar se puede ofrecer a las madres de la escuela.
– Repostería: para cumpleaños y fiestas en general. Todo el mundo cumple años y lo festeja, aún en tiempos críticos. Si se tiene hijos adolescentes se pueden hacer ofrecer en la misma escuela para las fiestas de egresados, cumpleaños de 15, de 18. Tortas con motivos especiales, cupcakes para eventos.
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