Sufrir un despido, y más en los tiempos que corren debido a la crisis económica por el coronavirus, no es un asunto nada agradable. No obstante, lejos de caer en depresión o negatividad, lo que hay que hacer es afrontar la situación y sacar el mayor partido posible de ella.
Una de las primeras cosas que debemos tener en cuenta cuando sufrimos un despido, es que esta es una decisión de negocio que se toma en cualquier negocio del mundo, por lo que no se trata de un ataque hacia nuestra persona. Los expertos explican que, en estos tiempos cada vez más inciertos, la reestructuración de una empresa puede ser crucial para su supervivencia.
Claves para encontrar empleo tras un despido
De este modo, es un error creer que se trata de una decisión personal, porque se es un trabajador incompetente o innecesario. No se debe caer en el error de menospreciar nuestro trabajo o nuestras capacidades laborales por un despido. Se trata simplemente de una decisión comercial y es importante comprender que aceptarlo nos va a ayudar a avanzar de una manera mucho más efectiva.
Por otra parte, si tienes sospechas de que puedes ser despedido, lo más adecuado es comenzar a buscar ofertas de empleo relacionadas con la formación que se tiene. Incluso, si ya se nos ha sido comunicado el despido de manera inminente, es preciso hablar con el superior al mando para solicitarle referencias que se puedan compartir con futuros empleadores.
Un despido es el momento preciso para tomarse un tiempo y plantearse la situación laboral en la que nos encontramos. Es posible que, al parar de trabajar por un tiempo, nos demos cuenta de que realmente queremos dedicarnos a otra cosa, o invertir nuestro tiempo de otra manera. Quizás incluso lo que nos apetece es apostar por nuestro propio negocio. La clave para descubrirlo se encuentra en la reflexión. Por lo tanto, durante las semanas posteriores al despido, es importante reflexionar y trazar un nuevo plan en torno a nuestro empleo.
Es fácil decirlo, pero ante todo, no podemos dejar que el temor a no volver a encontrar trabajo, o la ansiedad por nuestro futuro, nos dominen. Es esencial tener en cuenta los aspectos positivos que conlleva un despido, como poder pasar más tiempo con la familia y reflexionar sobre si el empleo realizado hasta ahora era el adecuado. Lo importante es buscar formas de hacer que las nuevas circunstancias a las que nos enfrentamos, sean mucho más llevaderas.
Pasado el tiempo necesario para reflexionar sobre el trabajo que realmente queremos desempeñar, con las baterías cargadas y dispuestos a lanzarnos al mercado laboral de nuevo, lo primero que hay que hacer, es repasar nuestro currículum. Si llevábamos mucho tiempo trabajando en la misma empresa, años quizás, es evidente que nuestro currículum va a necesitar ser actualizado.
Debemos hacerlo de una manera sencilla, clara y concisa. El currículum no debe extenderse más de lo necesario, ni tampoco quedarse corto, y es crucial usar un tono adecuado dependiendo del puesto de trabajo al que queremos acceder.
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