Tanta es la presión actual por encontrar trabajo, que cuando una persona se encuentra en situación de buscar empleo recibe cientos de estímulos diferentes, centenares de consejos emitidos desde todo tipo de soportes de comunicación y por supuesto por propio entorno de la persona. Desde luego que el todos tienen el objetivo de ayudar, sin embargo, tal despliegue de información puede contribuir a despistar más que sembrar, y hacer que la persona olvide las cuestiones básicas que realmente tiene que plantear desde el comienzo de este periodo dedicado a buscar trabajo.
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Todo el resto de consejos, ayudas o intenciones derivan de tres decisiones básicas que tomar y encauzar al inicio del proceso de desempleo y búsqueda de una nueva labor profesional, vamos a tratar de centrar estas dos cuestiones de manera general.
Qué es lo que busco
Suele ser una constante que en los procesos de búsqueda de empleo vayan dándose giros sobre la marcha en función de los resultados. Siempre que dejar margen para la flexibilidad y la improvisación, esto es cierto, pero también es cierto que tener claros los objetivos desde el principio resulta mucho más práctico. Hay que aprender a valora y determinar qué es lo que queremos obtener y hasta donde estamos dispuestos a ceder o derivar nuestra búsqueda de empleo, teniendo en cuenta esto desde el principio vamos a poder enfocar muchísimo mejor nuestra búsqueda.
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Cómo lo busco
Hay pocas cosas más perjudiciales, para algo que necesita ser metódico, como el desorden, este momento de la vida debe ser especialmente ordenado y metódico existe, se debe determinar qué canales de búsqueda de empleo se van a utilizar desde el principio, desde los envíos de currículum hasta el número de entrevistas que pretendemos obtener por cada canal, debemos manejar un auténtico proyecto de búsqueda de empleo en el que, poco a poco, ir introduciendo nuevos mecanismos y canales a la vez que ampliando nuestras redes sociales, tanto virtuales como offline. Efectivamente estamos hablando de un auténtico trabajo para buscar trabajo.
Cuándo lo busco
Si somos capaces de llegar a cumplir con los dos puntos anteriores, nos daremos perfecta cuenta de que necesitamos establecer unas rutinas de búsqueda de trabajo que realmente son muy similares a las que mantendríamos en una ocupación profesional. Conviene tener claro cuánto tiempo dedicamos a la búsqueda de empleo, pero, también, destinar una parte de nuestro tiempo a otras cuestiones como el ocio y las relaciones personales, que no deben descuidarse, algo que suele ocurrir cuando se utiliza mal el tiempo.
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