¿Se ha pinchado la burbuja de Tesla? "Creo que la empresa puede quebrar"
Dan Lekander, reconocido inversor bajista del fabricante, cree que sus acciones apenas valen 14 dólares
Actualizado : 16:49
"Este es el principio del fin de la burbuja de Tesla, la mayor de la historia bursátil moderna. Es más, creo que la empresa podría quebrar". Así de claro y rotundo se ha mostrado Per Lekander, socio gerente del fondo de cobertura Clean Energy Transition y reconocido crítico de Tesla, en una entrevista concecida a 'CNBC'.
Las palabras de Lekander llegan después de que Tesla informase que las entregas de vehículos experimentaron una sensible reducción en el primer trimestre de 2024. En concreto, el fabricante estadounidense de coches eléctricos entregó 386.810 vehículos entre enero y marzo, un 8,5% por debajo de la cifra de 2023 y también de las previsiones más pesimistas del mercado. La producción también fue inferior a la del año pasado, pasando de 440.808 vehículos en 2023 a 433.371 este año.
Lekander fue gestor en la firma de inversión Lansdowne Partners que avisó en 2018 de un 'rally' en los precios del carbono. Desde 2020, Clean Energy Transition ha estado corto de acciones de Tesla, lo que significa que la firma de Lekander se beneficiará si las acciones del fabricante de automóviles caen.
De hecho, este reconocido bajista ha asegurado que las acciones de Tesla podrían valer apenas 14 dólares, un 90% menos en comparación con los precios de cierre de este pasado martes. Según este experto, la compañía dirigida por Elon Musk "no tiene crecimiento" real y debería valorarse en 10 veces los beneficios futuros, en lugar de a los 58 actuales, ya que se estima que los beneficios por acción (BPA) de Tesla este año serán de 1,4 dólares.
De cumplirse la predicción de Lekander, Tesla todavía tendría mucho camino por recorrer aun habiendo perdido alrededor de un 33% en lo que va de año. Aún así, el propio Lekander cree que es imposible que la acción caiga por debajo de "cierto nivel" ya que, "debido a todo lo que está pasando, quebrará". "No veo ninguna razón en absoluto para que haya una recuperación en los próximos dos años, dado que estos modelos son rancios y dado que la economía no se está disparando", ha sentenciado Lekander.
Algunos de los argumentos de este gestor para mostrarse tan crítico con este valor son el modelo de integración vertical de la compañía, la cual gestiona casi todas las partes del proceso desde la fabricación hasta la venta al cliente. Esto, destaca, es "excelente" cuando la empresa crece, pero puede ser muy pernicioso si caen las ventas.
Asimismo, Lekander destaca que algunos de los problemas de Tesla tienen que ver con algunos problemas reconocidos por la propia Tesla, como las interrupciones en la cadena de suministro y fabricación de vehículos. En lo que va de año, la compañía ha tenido que suspender la fabricación de coches en su gigafactoría de Alemania hasta en dos ocasiones: una por los ataques de los rebeldes hutíes en Yemen y otra como consecuencia de un sabotaje eléctrico.
Lo cierto es que estas críticas, si bien son especialmente duras, no son nuevas. Numerosos analistas se han mostrado muy negativos con el futuro a corto plazo de la compañía de Elon Musk, la cual no convenció al mercado con su último informe de resultados. Entonces, reconocidos estrategas como Dan Ives, de Wedbush Securities, cargaron duramente contra la falta de 'guidance' por parte de la compañía y advirtieron de la poca confianza que tenían en el corto plazo.
"Digamos las cosas como son: aunque preveíamos un mal primer trimestre, este ha sido un desastre sin paliativos difícil de explicar. Vemos esto como un momento clave en la historia de Tesla para Musk: deben darle la vuelta a esto y revertir el pozo que ha sido el primer trimestre; de lo contrario, se avecinan días más oscuros que podrían perturbar la narrativa de Tesla a largo plazo", ha señalado Ives en un informe publicado este martes. Cabe recordar que, pese a su preocupación, Wedbush tiene una calificación de 'sobreponderar' sobre el valor y un precio objetivo de 300 dólares.
En las últimas semanas, la compañía ha elevado los precios de algunos de sus modelos en Europa y en Estados Unidos, unos movimientos que fueron recibidos con subidas por parte del mercado. Asimismo, Musk ha intentado revertir el pesimismo instalado entre los analistas al anunciar la nueva generación del deportivo Roadster, el cual podría estar listo para su envío el próximo año.