Los fondos de retorno absoluto, la cara amarga de un 2019 donde todo se dispara
La categoría ha subido un 3,8%, pero hay fondos que arrojan pérdidas de hasta el -45%
- Otros fondos que han 'pinchado' son el Algar Global Fund o los de duración negativa
El 2019 ha sido el mejor año para los mercados desde 2010. Todas las clases de activos se han disparado y los gestores están de enhorabuena... salvo los que gestionan fondos de retorno absoluto. Otra vez, estos productos alternativos han vuelto a decepcionar. En 2018, cuando todo cayó, no lograron terminar en verde, infringiendo su lema comercial: ganar dinero siempre, haga lo que haga el mercado. Y, este año, algunos fondos arrojan importantes pérdidas.
El fondo de retorno absoluto que más pierde este año es, precisamente, el que más subió el año pasado. El atl Capital Quant 25, de Juan Antonio Sanz, cede un -45%.
Otros productos muy afectados este ejercicio son el Esfera Team Trading, el 1 Kessler Global, el atl Capital Quant 5 (el segundo fondo de la categoría que mejor se comportó en 2018), el BBVA Retorno Absoluto, el Belgravia Delta, el Global Allocation (de Luis Bononato), el Belgravia Épsilon, el Solventis Apolo Absolute Return, el Ibercaja Alpha, el Santander Retorno Absoluto, el KBL Precision Absolute o el Quality Global, entre otros, con retrocesos que oscilan entre el -24% y el -1,3%, según Morningstar.
Estos fondos son comúnmente englobados bajo una misma tipología, la del retorno absoluto, aunque en realidad atienden a estrategias diferenciadas. Los hay alternativos multiestrategia, mixtos flexibles globales, market neutral de renta variable, global macro y también long/short de renta variable. Muchas pieles para una misma sensación: aunque no todos son iguales, ya que bastantes han ganado dinero este año, en conjunto, la categoría está lejos de funcionar.
Noticia relacionada
Los gestores aconsejan bolsa y bonos ligados a la inflación para 2020La parte optimista es que, según el avance anual de Inverco, los fondos de retorno absoluto han cosechado un rendimiento del 3,8% en promedio durante el 2019. Sus resultados se encajan en la parte alta de la horquilla -solo los rendimientos positivos- sobre la que han basculado desde su nacimiento en 2009, entre el 0,1% y el 4,2%.
Pero de estas cifras se pueden extraer tres conclusiones, y todas malas o, cuanto menos, regulares: la primera es que, en conjunto, han ganado cuando todo el mundo también lo ha hecho; la segunda, sin embargo, es que no se han desmarcado en los años de pérdidas; y la tercera es que, aun subiendo la categoría en los años de bonanza como éste fruto de la inercia del mercado, hay fondos que lo siguen haciendo muy mal. Por tanto, si un inversor compra un fondo de este tipo para usarlo como todoterreno, la ‘due diligence’ debe ser más exquisita aún que con otros fondos.
OTROS FONDOS QUE ‘PINCHAN’
Los fondos de retorno absoluto no son la única nota discordante en un año donde todo ha subido como la espuma. Hay fondos muy conocidos entre el público general que también han ‘pinchado’. Algunos de ellos son el Bankinter Eurostoxx Inverso (cuya función es hacer lo opuesto a la bolsa europea), el Algar Global Fund (de ‘small caps’ europeas, asesorado por Jean Claude Felguera, Walter Scherk, Beatriz Paredes y Juan Perea), el Mutuafondo Duración Negativa y el CaixaBank RF Duración Negativa (encallados a la espera de una subida de tipos del BCE que se hará de rogar), el Azvalor Capital (cargado de efectivo y deuda pública) o el Imantia Fondepósito (ya sin depósitos institucionales extratipados donde rascar como antaño). Sus pérdidas están entre el -26,4% y el -0,7%.