Nacionalizaciones, más impuestos a los ricos y CEOs peor pagados, el futuro según Schroders
La gestora apuesta por el inmobiliario y la renta variable asiática
- En este nuevo contexto, es poco probable que el dinero en efectivo y los bonos vayan bien
Actualizado : 09:18
El mundo después del Covid-19 y la crisis económica generada por la pandemia será muy distinto al que había hasta ahora. Schroders, una de las principales gestoras de fondos del mundo, se aventura a pronosticar que la nueva normalidad conllevará más populismo en los gobiernos, nacionalizaciones de empresas, unos impuestos más altos para los ricos y unos sueldos más bajos para los consejeros delegados y directores generales. En su opinión, las mejores opciones que tienen los inversores a futuro son el inmobiliario o la renta variable asiática.
Según Robin Parbrook, codirector de Inversiones Alternativas de Renta Variable Asiática en Schroders, los ‘millennials’ y la generación Z están mucho más abiertos a los “grandes gobiernos” y al populismo, en comparación con las generaciones de los ‘baby boomers’ y la generación X, que recuerdan “los males” de los años 70, en referencia a las últimas dictaduras del siglo XX. “El ‘Gran Gobierno’ significará que los gobiernos aumenten el control y la inversión directa de capital, el gasto en investigación y desarrollo, y que los gobiernos posean o controlen la infraestructura económica crítica clave, como transporte, servicios públicos, telecomunicaciones o bancos”, esto es, en el futuro podrán verse nacionalizaciones en los principales países desarrollados. También visualiza una Europa federal toda vez que Alemania haya aceptado la “generosidad fiscal”.
El gestor de Schroders también prevé que los ricos paguen más, ya sea a través del impuesto sobre la renta, las ganancias de capital o los impuestos sobre el patrimonio. Asimismo, las garantías de ingresos mínimos, como la renta básica que va a aprobar España, “también pueden arraigarse en muchos países, especialmente en aquellos que las han introducido efectivamente debido a la crisis de Covid-19”.
El sistema económico y social actual podría estar al borde del colapso y, en este sentido, Parbrook cree que el capitalismo “amiguista” se acabará. Así, las recompras serán penalizadas al igual que las compensaciones exageradas de los directores generales. Es más, la tendencia según la cual la remuneración de los directores generales multiplica cada vez más los ingresos medios de los empleados se invertirá.
Estas son algunas de las ideas sobre el futuro que pone sobre la mesa el experto de Schroders, en base al análisis de la actualidad y de la serie histórica de datos. Aunque Parbrook califica este nuevo escenario de “especulación”, reconoce que están “bastante convencidos de en qué dirección vamos respecto a los temas anteriores, aunque no de a qué velocidad”.
POR QUÉ INVERTIR EN ASIA
El nuevo contexto político, económico y social “no es un telón de fondo muy favorable para los activos financieros”, considera el directivo, para quien es poco probable que el dinero en efectivo y los bonos vayan bien. Algunas áreas de la renta variable y el inmobiliario deberían ser una mejor cobertura de la inflación, pero “la clave será centrarse en aquellas áreas menos propensas a la intervención del gobierno”.
Parbrook, especialista en las bolsas asiáticas, se muestra muy favorable a invertir en estos parqués por dos razones. “Los niveles iniciales de deuda pública en Asia son mucho más bajos que en Occidente, por lo que el alcance del reajuste de políticas mencionado anteriormente puede ser menor”. Asimismo, aunque estos países no sean inmunes a los cambios estructurales mencionados, “me preocupa menos el impacto del nuevo ‘Gran Gobierno’ en los valores asiáticos y, por supuesto, en China el ‘Gran Gobierno’ ya es la norma”.