España gusta a los fondos soberanos, que disparan su inversión hasta los 1.500 millones
Se mantiene como uno de los diez destinos favoritos de estos vehículos inversores en el mundo
Los fondos de inversión soberanos apuestan cada vez más por España. Así lo demuestran los últimos datos recogidos por el informe de la IE University en colaboración con ICEX-Invest in Spain. Entre enero de 2018 y septiembre de 2019, estos vehículos dispararon su confianza en nuestro país hasta los 1.500 millones de euros.
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La suma fue desembolsada en las arcas españolas por seis fondos soberanos. Su principal apuesta entre las cotizadas españolas fue Cellnex, que actualmente cuenta con el instrumento de inversión de Singapur, el GIC, y Abu Dhabi Investment Authority (ADIA), como accionistas de referencia.
Más allá de las cotizadas, los fondos soberanos muestran una especial gula por el sector privado. Un claro ejemplo es la segunda ronda de inversión en la malagueña Premo Group cerrada por el vehículo inversor del Reino de Bahrein, Mumtalakat. La primera apuesta de este en territorio español se remonta a 2016, año en el que entró en la asturiana Aleastur.
La deuda pública también despierta el interés y el bono español representa una de las seis posiciones principales del fondo soberano noruego. Un mérito que sabe mejor al tener en cuenta que España adelanta en esta clasificación a países mayores en términos de PIB como México, Italia y Corea del Sur. A septiembre de 2019, los noruegos estaban invertidos en 5.200 millones de deuda pública española, es decir, un 17% más que en el año anterior.
¿Y de cara al futuro? El informe prevé que el paladar de los fondos soberanos salte a por el sector de las energías renovables. Cabe recordar que el noruego ya obtuvo la autorización para invertir en empresas verdes no cotizadas a finales de 2019.
LA INVERSIÓN EXTRANJERA NETA, EN MÁXIMOS HISTÓRICOS
En términos netos, la entrada de dinero extranjero en España se ha situado en los 45.000 millones de euros en 2018, un 62,7% más que en 2017. Esta cifra es la más alta desde que se tienen registros, es decir, desde 1993. Para 2019, a falta de obtener los datos completos, esperan un ejercicio algo más flojo.
Si tenemos en cuenta la inversión extranjera directa en España, la cantidad asciende hasta los 55.600 millones de euros en 2018, un 37% que la registrada en el mismo periodo del año anterior.