Cuando entramos a trabajar en un lugar, lo más recomendable es informarnos de qué esperan de nosotros, de cómo se trabaja en esa empresa y de cuáles son las expectativas de crecimiento de la compañía. Con estas variables, podremos asegurarnos el puesto o buscar otra opción mejor.
Según publica BBC, el consultor en desarrollo profesional Al Stewart, fundador de Business Mentors, explica que "ninguna carrera está a salvo de cambios, reingeniería, competencia global, obsolescencia tecnológica", u otras variables que puedan alterar el equilibro que tenemos en un determinado puesto.
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El hecho de poder encontrar un trabajo para toda la vida es, actualmente, casi imposible. Por eso, es más inteligente desarrollar nuevas competencias y habilidades que centrarse en un único puesto. Estas fortalezas nos otorgarán ventajas ante otros candidatos. "Tienes que estar listo para incorporar nuevas herramientas y tener la disposición de cambiar de área o asumir el riesgo de nuevas decisiones que te permitan anticipar las curvas que vendrán a ti en lo profesional", indica Stewart.
Tienes que estar listo para incorporar nuevas herramientas y tener la disposición de cambiar de área o asumir el riesgo
Para ello, es recomendable estar dispuesto a cambiar y a arriesgarse. No quedarse en la zona de confort y aprender nuevas cosas que puedan enriquecer el currículum y la participación en un proyecto. Para ello, basta con seguir estas siete indicaciones.
1- Fabrica tu marca personal
Empezar a trabajar poco a poco en tu marca personal online hará posible que cada vez más gente te conozca. Para ello, trata de conectar con 10 personas en LinkedIn a la semana, recomienda a compañeros, busca respaldo de empresas o personas influyentes, participa en grupos de discusión y, en definitiva, mantente en contacto con los profesionales de tu sector.
2- No te quedes parado
Aunque ya tengas trabajo, lo ideal es que no te estanques en tu conocimiento. Por eso es importante asistir a conferencias, ampliar tus idiomas, conocer la actualidad de tu sector y mantenerte conectado con empresas y profesionales a través de las redes sociales.
3- No dejes de buscar entrevistas
No importa que no quieras cambiar de empleo, entiende que nada es para siempre y que siempre se puede mejorar. Un contrato no es más que la manera de formalizar un acuerdo ventajoso para dos partes: la empresa y el trabajador. Piensa que cuando esa condición no se cumpla, puede que tu puesto peligre y es mejor estar alerta. Además, asistiendo a entrevistas mejorarás tu manera de encararlas y tendrás una idea mejor de qué puedes ofrecer para cuando llegue el momento de cambiar.
4- Diversifica tus actividades
Si sólo sabes hacer una cosa en la vida, o eres el mejor haciéndola o te estás cerrando muchas puertas. No dejes nunca de aprender nuevas funciones y genera conexiones con gente que te pueda aportar.
Si no encaras cada día como si fuera el último, tu puesto puede correr peligro
5- No te acomodes
Probablemente es el mayor riesgo de cualquier trabajador. Si no encaras cada día como si fuera el último, tu puesto puede correr peligro. Esta situación es una de las más repetidas y por eso tienes que cuidar tu puesto desde el primer día hasta que tengas que dejarlo.
Kathy Caprino, consultora de recursos humanos, explica que "cientos y cientos de líderes corporativos, hombres y mujeres mayores de 50 años, son despedidos de sus cargos, y es entonces cuando se dan cuenta que no han construido una red de apoyo. No se han actualizado profesionalmente, no han aprendido nada sobre las nuevas tendencias en su área y no han permanecido cerca de personas que pudieran recomendarlos o ponerlos en contacto con empleadores", sentencia.
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6- Olvídate del empleo para toda la vida
Eso se acabó. El hecho de tener un empleo que te guste no significa que sea para siempre. Por eso es recomendable seguir mejorando y tratar de buscar lo que te motiva. Si no lo tienes búscalo y si lo tienes, trata de conservarlo para poder optar a otras posiciones relacionadas, en las que tengas más poder, salario o funciones que te motiven más.
7- Busca un empleo que suponga un desafío
Al hilo del punto anterior, encontrar un trabajo que no sea mecánico y repetitivo influye positivamente en que no te relajes cuando lo realices. Esto, sumado a un continuo aprendizaje te abrirá más puertas.
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